Bakugo y Kirishima han sido inseparables desde niños. Nadie podía compararse a aquél potente duo. Sin embargo un día Bakugo siente como algo en su interior se destroza al saber que su mejor amigo se ha enamorado. Para colmo le pide que lo ayude con...
Era una mañana tranquila en la famosa escuela de héroes. Los pajarillos cantaban y el cielo hermoso brindaba un ambiente acogedor, animando así a los estudiantes a empezar el día llenos de energía.
Aunque esto no aplicaba para el joven Bakugo.
Las voces mañaneras llenas de entusiasmo junto con un ambiente de paz le enfurecían. Éste yacía recostado en la pared murmurando maldiciones, viendo atentamente la entrada, con brazos cruzados y cara de maleante.
Poco a poco los murmullos sobre él aumentaron. Era lo típico.
"¿Está Bakugo esperando alguien?"
"Que extraño es verlo sin gritar SHINEE"
"Cierto, él da miedo con esa expresión"
"Él da miedo siempre."
"De seguro está esperando a su único amigo de infancia."
"¿Será el chico pelirrojo que le sigue como perro faldero?"
"Debe de ser, creo que se llama Kirishima..."
"¿Eijirou? Ese es un verdadero idiota, enamorando a las chicas con esa asquerosa sonrisa, deberían de prostituirlo, ¿Quieren su pack? "
Oh oh, esa fue la gota que derramó el vaso.
BakugoKatsuki: ¡¿Qué acabas de decir maldito?! - Le gritó con toda sus fuerzas.
No podía seguir aguantando estupideces. Aunque bueno, no era como que él tenía mucha paciencia.
Se volteó para buscar a aquél que se había atrevido a mencionar el nombre de Kirishima y a insultarle.
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El chico al ver como el rubio se acercaba a él sin una pizca de amabilidad sintió el verdadero terror. Bakugo tomó del cuello de su camisa violentamente.
BakugoKatsuki: Idiota,¿Quién te crees que eres? - Le preguntó mirándole fijamente lleno de cólera.
¿?: Ja, ¿Enojado porque llamé el nombre de tu novio...? Ahgg. - El chico soltó un quejido de dolor al sentir sus nalgas contra el suelo.
BakugoKatsuki: Ja, ¿Quieres pelear, maldito? - Sus ojos reflejaron una inmensa furia y emoción.
El muchacho no tenía posibilidad alguna de si quiera poder pegarle. Él era el gran Bakugo. Tan solo verlo de lejos era más que suficiente para sentir esa poderosa aura consumirte.
¿?: Tranquilo viejo. - Tragó duro.- Sólo era una broma. - Confesó algo nervioso.
Este tipo de personas eran los que más repugnaban a Katsuki. Aquellas que se atreven a fastidiar a los demás y después se ponen a lloriquear si las consecuencias llegan
