Sigo mal

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Era otro día en el aula, todos conversaban sobre que sucedió en la fiesta a excepción de Al y Napoleón quienes no fueron.
Napoleón aún estaba enfermo, se adormilaba entre clases por lo débil que estaba.
Cuando llegó el profesor de historia, el francés lucía cansado.

Profesor Larry: Buenos días alumnos, cómo estuvo su fiesta para la recaudación de fondos?.

Sacajawea: Fuimos casi todos los del salón y todos los de la tarde, nos la pasamos muy bien.

Amelia: Hicimos un concurso sobre quién de nuestra aula fue elegido para el regalo del cofre de chocolates.

Custer: Ganó uno de los que no fueron al evento.

Lancelot: De esta aula no fueron dos de nuestros compañeros, todos ya sabemos quienes son.

Todos voltearon hacia los lugares de Al y Napoleón.

Al: Verán... Yo no pude ir porque tenía clases de Tae Kwon Do, pero si aporte con algo.

Teddy: Al tiene razón, el ayudó con una buena cantidad de postres además de los que trajo Erica.

Profesor Larry: Entiendo, Al no fue al evento pero si aportó, entonces él otro que no fue al evento es cierto chico que le toca presentar tema libre.

Napoleón se hacía que no escuchaba.

Profesor Larry: Bonaparte... No tienes una presentación que hacer?.

Napoleón estaba adormilado recargándose en el pupitre, a lo que Al lo tocó del brazo para despertarlo.

Napoleón: Eh? Qué sucede? -preguntó confundido.

Al: Dice el Profesor que tienes tema libre para exponer, si es así yo quiero escucharte.

Napoleón: No sé como empezar.

Profesor Larry: Vamos Napoleón... Tus compañeros te quieren escuchar.

Napoleón no tuvo más remedio que pararse de su sitio, aunque muchos notaron que tenía dificultad para mantenerse de pie, él se mantuvo en el lugar del profesor para comenzar a relatar su novela histórica.

Napoleón: Hoy les quiero platicar sobre una novela histórica que escribí aunque claro... Tiene un poco de ficción por las criaturas fantásticas.

Tilly: Así como Harry Potter o Maléfica?.

Napoleón: Umm no tiene la magia de esas obras pero yo me voy a centrar en la Antigua Grecia.

Octavio: La cultura romana y griega me fascina!.

Erica: Tu obra estará de lujo, cuéntanos.

Napoleón: De acuerdo, ya comenzaré.

Muchos se mostraban serios ante el momento, querían escuchar lo que tenía que contar.

Napoleón: Esta es la historia de Casandra, una doncella que se fue a la Guerra de Troya vestida como un soldado Troyano, fue llamada por el Dios Ares para que luchara contra los atenienses, ella daba su máximo esfuerzo en la guerra y cuando buscaba el amor después de la guerra la Diosa Afrodita le recompensó por su lealtad...

Octavio: Y que más sigue?.

Justo en ese momento sintió que todo le daba vueltas, a lo que se sentó de una en el asiento del profesor.

Profesor Larry: Te sucede algo? De repente tuviste un bajón.

Napoleón: Si, de repente me sentí mal.

Profesor Larry: Si no puedes continuar entregame el escrito de la obra.

Napoleón: Está bien, no sé porque me siento tan mal.

El menor se fue a su lugar y todavía se sentía mal, su cuerpo estaba débil además del mareo que sentía.

Profesor Larry: En la próxima semana les entregaré una copia de la obra de su compañero a cada uno de ustedes.

Después de la clase, todos harían su último ensayo para la obra de teatro, se dirigieron al aula todos incluyendo a Al y Napoleón.

Profesora Rebeca: Muy bien muchachos, ya este es nuestro último ensayo, quiero ver como va todo, ya tienen vestuarios y escenografía, a eso le vamos a dedicar este último ensayo.

Al y Napoleón solo miraban los vestuarios de los compañeros.

Al: Jed! Octavio! Sus trajes de Eros y Helios están geniales.

Octavio: Estas togas son bastante cómodas.

Jedediah: Para ti que eres romano de nacimiento si, pero para mi es extraño.

Octavio: Tienes razón, aunque tu toga es larga y la mia es corta.

Ahkmenrah: Mi disfraz de Hermes me encanta.

Lancelot: Te ves bien, las sandalias aladas están mejor de lo que imaginaba.

Ahkmenrah: Me fascinan, y tú serás buen narrador.

Lancelot: He ensayado bastante para esta obra, lo harás bien.

Lancelot tenía intenciones de abrazar a Ahkmenrah pero Kahmunrah interrumpió apartandolos.

Kahmunrah: Hermanito... Qué opinas de este atuendo que me hará ver como Cronos?.

Ahkmenrah: El dorado te queda bien.

Kahmunrah: Gracias hermanito, solo quería escuchar tu cumplido.

Kahmunrah le sonrió a Ahkmenrah, y después fue con Lancelot para amenazarlo.

Kahmunrah: Si me llego a enterar o ver que le haces algo a mi hermanito, te mato! -susurró en forma de amenaza.

Lancelot: No somos novios tranquilo, no seas tan posesivo.

Kahmunrah: Nadie toca lo que es mío!.

La profesora vio como Al cuidaba de Napoleón mientras veían como los compañeros se preparaban.

Profesora Rebeca: Todo bien allá, joven Capone y jovencito Bonaparte?.

Al: Es que Napoleón se ha sentido un poco mareado y débil, yo cuido de que no empeore.

Profesora Rebeca: Muy bien, eres buen chico Al.

Al: Yo quiero que él esté bien, para eso estamos los amigos.

Napoleón seguía estando pálido.

Al: Salgamos para que tomes aire.

Napoleón: No, así estoy bien, quiero ver como ensayan.

Comenzaron los ensayos, todos con los vestuarios y sin tantos errores de actuación.

Profesora Rebeca: Están casi listos! Pero sigan practicando, mañana será la obra a la última hora de clase.

Después de las clases

Al: Frenchie... Mañana debes venir a ver la obra y en dos días debes venir a la fiesta.

Napoleón: Si sigo así de mal no iré.

Al: Entiendo, ojalá te sientas mejor, no quisiera estar solo.

Al tomó la mano de Napoleón.

Napoleón: Perdóname por dejarte tan pronto pero debo irme a casa rápidamente...

Napoleón debía irse rápidamente a casa para consumir su medicamento y se midió.

Napoleón: Eh? No he crecido nada, debo asimilar que me quedaré enano para siempre -dijo un poco desanimado.

Napoleón estaba desanimado por todo.

Napoleón: Si no crezco no me voy a desarrollar bien, no usaré la ropa de adoslecente que quisiera usar, no podré tener hijos y nadie me va a querer así, siendo un... Niño!.

El francés estaba desesperado llorando cubriendo su rostro con sus manos.

Napoleón: Nadie va a quererme así de enano, si Al se entera de la verdad me va a dejar de hablar y perderé a mi único amigo en la vida -dijo mientras sollozaba.




En el jardín (Al Capone x Napoleón)Where stories live. Discover now