"Parecíamos gigantes el uno al lado del otro como si, si fuéramos de la mano, nos comeríamos el mundo. Lo pudimos haber hecho pero parece que el mundo nos comió a nosotros. Pero, a pesar de ello, seguiremos estando juntos, a ratos, a párpados. Quizás el mundo se cansó de que se tuviera que parar cada vez que me sonreías. O quizás tuvo celos de mí por tener tu sonrisa tan cerca de la mía. O simplemente quiso jodernos por habernos sentido gigantes juntos. Pero ahora, ahora nos ignoramos por el miedo de la reacción del otro, aunque nuestras sombras siguen mirándose. Hay algunos días en los que me arrepiento de haberte querido y odio en lo que te has convertido. Me doy cuenta que ya no queda nada, de que el mundo se ha negado a pararse para que me sonrías, que parece que lo único que quiere es caerse encima mía. Pero jódete mundo porque nunca te sentirás gigante con él, a su lado".
