casada con Dios (RadioX)

capitulo 3: comienza el juego

Después del incidente, me dediqué a mi trabajo como conductor de radio, decidí  investigar a mi nueva "amiga"

Consegui un poco de información sobre nuestra preciada novicia, tuve que dar algunas vueltas por el convento, en donde entable conversaciones y "amistades" con algunas monjas, en especial con la más importante, la madre superiora. Fue difícil pero lo logré gracias al resto de monjas que le llenaron la cabeza con curiosidad sobre mí.

Me di un tiempo para cazar entre tanto ajetreo, es mi forma de relajarme. Han sido casi 2 meses de conversaciones indeseables, con algo de parloteo religioso, pero este tiempo invertido sirvió para conocer a algunas de las monjas y novicias que se encuentran a su mando.

Lo más conveniente para mí, pero problemático para la novicia de quien estamos hablando, es que la madre superiora siempre tiene algo que decir de Vagatha. Expresa su frustración por la chica con quien esté dispuesto a escuchar y siempre estoy dispuesto a escuchar.

Al parecer nuestra querida y encantadora señorita es una rebelde de entre sus hermanas, causante de problemas, desconsiderada, violenta y rompedora de leyes. Acusaciones muy graves por decir lo menos.

Aunque todo el veneno que escapa de su boca suene convincente, hay algo más en esa mujer, no creo sea tan terrible, si fuera así, ¿por qué aún sigue aquí?, la hubieran expulsado hace tiempo.

Hay que aclarar, su comportamiento no es del todo conservador, pero con lo poco que pude averiguar de su propia boca, sigue con devoción las leyes religiosas.

En mi investigación, no conseguí mucho de ella, casi nada, es como si hubieran intentado silenciar su existencia. En algunas noticias viejas y chismes que circulan por ahí, he podido averiguar que Vagatha es hija de un exportador americano y ya, eso es todo. La noticia es de este año, fue sorprendente para gran parte de las personas que conocen al hombre. Podemos concluir que su padre hizo lo imposible por ocultar la existencia de su hija y por alguna razón, se vio forzado a revelar la verdad.

Mis idas al convento no parecen hacerla muy feliz, intenta evitar estar en el mismo lugar que yo, aunque siempre esté acompañado de alguna monja, Su mirada está encima de mí constantemente pero de forma agresiva y desde muy lejos, intentando no ser obvia. Mis intentos de acercamiento son siempre ignorados, alejándose al momento que nota mi cercanía.

No estoy enojado, aunque me disguste su forma de actuar, he intentado entablar una conversación hasta el hartazgo, ni siquiera me habló para comenzar una riña sobre mi presencia en este lugar, el primer día que me vio parecía sorprendida y poco tiempo después enojada. Estaba esperando el enfrentamiento verbal, la observaba de reojo mientras el resto de novicias se acercaban preguntando cosas sobre mí y mi trabajo, mientras ella se quedaba a lo lejos vigilando.

La madre superiora ha empezado a confiar en mí. Tuve que aprender sobre su religión para lograr eso, la señora me ve como un buen Cristiano, incapaz de dañar a alguien, humilde y responsable, es gracioso, si supiera todo lo que hay detrás de mis palabras, no me vería con tan buenos ojos.

Con el tiempo y escuchando sus múltiples e interminables quejas sobre la oveja descarriada, llegó a mí una idea, la cual me encargaré que la madre superiora no rechace.
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He estado muy estresada todo este tiempo. Ese lunático volvió a aparecer, aún después de que le exigí que jamás volviera. Su presencia me tiene en constante movimiento, asegurándome que no planea nada en nuestra congregación.