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셋

La siguiente mañana, los asistentes del palacio levantaron poco antes del amanecer a los candidatos hospedados en el palacio del emperador. Los reunieron a todos en el pabellón y les sirvieron deliciosa comida. JaeNo se sentó junto al joven de anoche que mejor le cayó, So Deok-Jun.

—Me pregunto por qué han decidido despertarnos tan temprano.—

Preguntó el de cejas gruesas. JaeNo comió del arroz, mientras que otro joven respondió:

—Tal vez habrá algo interesante el día de hoy.—

Pronto, llegó el consejero real; era un hombre delgado pero no muy alto, tenía una barba fina y solo en su mentón , y no portaba algún tipo de sombrero... JaeNo no quería pensar mal o hacerlo inferior, pero, era simplemente un buen sirviente leal para el emperador. Era por ello que nadie ahí le dio reverencia, si no eras alguien de estatus noble o adinerado, no merecías ese tipo de respeto. Habían algunos nobles que entre ellos aún se respetaban porque seguían siendo de la misma "clase", pero algunos nobles más altos que otros solo los trataban como basura o seguidores.

El consejero aclaró su garganta y comenzó a hablar:

—Buenos días jóvenes competidores. Espero que su estancia aquí, en el palacio, sea de su mayor agrado. Vengo a explicar en qué consistirán las pruebas de hoy. Estas serán dos pruebas. La primera, consiste en probar sus conocimientos de distintos aspectos, como política, comercio, lo militar , la agricultura y mucho más. Y la segunda, probará sus habilidades con la espada. Como habrá mucho público el día de hoy, ambas pruebas tomarán lugar en el campo de entrenamiento abierto del palacio . En aproximadamente cinco horas, volveré para guiarlos a la competencia, mientras, tienen el tiempo suficiente para estudiar o entrenar lo más posible. Después de eso, no se les dará la oportunidad de volver a repasar o practicar aún si esperan su turno. Bien, me retiro, disfruten su comida.—

El hombre dio una reverencia, se dio vuelta, bajó los pocos escalones del pabellón y se retiró, dejándolos solos. Hwang Wook-Hee, ahora sí bien vestido , se puso de pie, con su taza de té en alto. Con una sonrisa confiada y sus ojos viendo a todos ahí, decidió hablar:

—Les deseo la mejor de la suerte, puede que no poseamos de licor para brindar, pero la taza de té en mi mano es más que suficiente. Aunque, siendo honestos, dudo que alguien más aparte de la persona que tengo en mente pueda ganar la prueba del uso de la espada. ¿Qué opinas Jung Yoon Oh? ¿Verdad que eres lo suficientemente capaz de ganar sin un solo rasguño? Porque siempre escucho de las increíbles historias de tus talentos pero es una pena que jamás he podido presenciarlo, definitivamente me convertiría en un seguidor tuyo si logras ganar.—

Todos miraron hacia dónde lo hacía el recién hablante. JaeNo miró atentamente al joven , quien tenía el labio inferior levemente más grande que el superior, con hoyuelos marcados en sus mejillas, y un sombrero Jeonnip amarrado debajo de su barbilla con un listón negro , su sombrero era de un color oscuro y en la parte superior tenía unas tres plumas largas que iban en diagonal hacia su derecha. Los que usaban ese tipo de sombrero pertenecían a los militares. Cuando no usaban el casco de su armadura, utilizaban ese sombrero; después de todo, era hijo de un importante general, Yoon Oh ya había tomado mando de algunas tropas en enfrentamientos de no mucha gravedad y demostraba su gran capacidad de estrategia y su uso de la espada sorprendía .

El militar bajó la cabeza un poco, bebiendo del té, y su sombrero cubría la mayoría de su rostro. Al tragar, dejó la taza en la mesa, estiró un poco los labios y miró hacia Wook-Hee. Algunos dudaban si el que estaba de pie lo había halagado o con sutileza intentó burlarse, las palabras cambiaban cuando veías la expresión divertida del parlante. Yoon Oh seriamente suspiró y dijo en un tono bastante moderado: