9:46 P.M. Déjate llevar

190K 11.2K 8.4K
                                    

⚠Advertencia
Este capítulo posee escenas inmorales entre chicos con lenguaje explícito, si no te agrada este tipo de contenido tienes toda la libertad de retirarte, y sino, disfruta del capítulo.

Katsuki no perdió el tiempo, al tener en posesión la cintura del menor, con ayuda de la misma, hizo que Izuku se acercara más a él, que sus pieles contactaran en roces suaves, y que, impúdicamente, Deku percibiera al fin y al cabo lo que rozaba anteriormente, pues ahora lo sentía a mayor escala, inocentemente, el pobre pensó que era otra cosa. Entonces empezó; lamió su cuello, causó mordidas, algunas profundas y violentas, y otras corrientes, o succionaba su piel. El chico de iris verdosos simplemente no sabía qué hacer, estaba pasmado, en su mente circulaban miles de incógnitas que giraban en un ciclo infinito; ¿qué debería hacer ahora?, ¿acaso... Kacchan lo utilizaba para entretenerse?, ¿para quitarse las ganas?, ¿acaso sí lo hacía a gusto?, ¿le gustaba? No, un rotundo no, Kacchan jamás gustaría de él, entonces... ¿estaba en esos momentos donde te toman como un juguete? Probablemente, esa fue la única respuesta que logró encajar, una que halló utilizando lógica. Debería enojarse, sí, darse a respetar, sí, pero con Katsuki Bakugo era un caso especial, haciendo una comparación u ejemplo, Midoriya enfrentaba una situación sorprendentemente familiar a la de un juguete, que si no funcionaba o hacía lo pedido, el niño lo desollaría sin piedad, pues él era ese juguete, y era mejor funcionar a ser cruelmente torturado, llegó a esa conclusión, permitiría que haga lo que él quisiese solo para eludir una catástrofe y evitaría en lo posible ceder, en resumen, se mantendría en un estado neutral, pues tampoco le festejaría a Kacchan lo que le hacía gimiendo complacido como perra barata, no, en contraste, procuraría producir el menor ruido posible ante las estimulaciones dadas.

En cuanto a Todoroki, continúa procesando lo sucedido, aún le impactaba todo lo acaecido, no lo podía creer, se negaba a creer el escenario impuro que Bakugo y Deku le mostraban frente a sus ojos, pero de una u otra forma tendría que escapar del pasmo, de una u otra forma tendría que obligarse a convencerse que lo que ocurría era real y, sin lugar a dudas, estar en la labor de detenerlo.

— ¡¿Qué carajos haces?! — dijo finalmente, saliéndose de sí mismo.

— ¿Acaso no ves? Solo me estoy divirtiendo, puedes unirte si quieres — expreso en tanto que seguía esparciendo chupones en la piel de su cuello, con un tono sumamente calmado y natural.

— ¡¿Cómo puedes decirlo tan normal?! ¡No me puede unir así como así sabiendo la situación en la que estamos y que prácticamente estás haciendo eso en contra de su voluntad! — exclamó bajo enojado, siempre odió las pésimas decisiones tomadas por el rubio, y definitivamente esta se está pasando de lo racional.

Ante las palabras del de ojos heterocromos, se separó de la piel de Izuku.

— Escucha bastardo mitad y mitad, las consecuencias a mí no me preocupan porque no existen, nadie nos descubrirá por el simple hecho de que en la preparatoria solo hay tres guardias, dos vigilan las afueras, y el otro pocas veces pasea la cafetería o los salones, nosotros estamos prácticamente a distancias remotas de los cursos y la cafetería por lo que no nos escucharán, además, cabe destacar que a veces ni vigilan la escuela, y si lo hacen, se duermen, créeme, puedo confirmarlo, ¿por qué crees que acepté hacer este reto, incluso sin ustedes? — informó eficaz, callándolos a ambos — además, no hago nada que él no quiera, no se ha quejado, y si quiere clamar ahora, el tiempo de arrepentirse terminó — canturreó vengativo, con su usual sonrisa retorcida y mirada profunda, volviendo a lo suyo.

Deku cerró la boca y los ojos opresivamente, pues Bakugo al ya saturar la curvatura de su cuello con chupones y mordidas las acentuaba volviéndolas a recalcar, si ya en sí le dolía su manera de marcar, retomar su profundes era aun peor.

Closed Room •Todobakudeku•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora