Es cierto que el amor de los 16 nunca se olvida. Sabes que nunca lo olvidarás, y tienes la esperanza de voverlo a sentir. Lo esperas, y lo desesperas.
Reencuentros destinados a pasar, o simplemente casualidad. Miradas cruzando el salón, miradas que cortan, que hierven, que celan, que matan. Palabras entre vientos que se llevan las olas... secreto que pocos saben.
Has vuelto a probar el sabor de aquel amor, aún mas intenso en el paladar. Ahora no solo oyes, hablas y miras, sino también tocas y sientes un nuevo sabor. Pero no es tuyo. Te han prestado un amor por 5 días. Suficiente para volver a sentir esa sensación de mariposas como a los 16 antes de devolverlo a su dueño. Pero ya no es tuyo.
Llegas a los 20 y aún lo esperas. Pero ya tienes un recuerdo vago. Sabes que estás esperando, pero ya no recuerdas a quién. Aún esperas aquel amor, o esperas un nuevo amor, uno que puedas hacer lo que no pudiste con el anterior.
Pero sigues esperando. Hasta que te das cuenta que lo único que al final solo llega, es el invierno.
Y si no puedes cambiar el amor de tu vida por un nuevo amor, al menos cambias tu vida por una nueva.-N-
*Foto por (Instagram): @photos_garse
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Las más de una Historia
RandomCada capítulo de este libro es una historia de la vida (la vida, algo muy grande para poner entre paréntesis, o para encerrarla en unos cuantos renglones). Puede ser de la tuya o de la mía... yo la cuento por los dos. Instagram: @lizz_garse *Agradez...