Capítulo 5: Lucha contra el primer líder, aniquilando la roca 1

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Al recuperar la salud a mis pokémon volví a mi habitación a ducharme y dormir. Para ser sinceros Laila me despertó a las 6:30 am la cual estaba tocando la puerta de mi cuarto acompañada de Mark. Les pedí unos segundos y realicé las labores matutinas y al transcurrir 10 minutos me encontré con los chicos en la cafetería.

Aquí desayunamos y tomamos camino hacia la Colina Rand donde era un poco difícil de atravesar por lo que muchos la rodeaban y demoraban 4 días en llegar a Ciudad Lichy pero nosotros de intrépidos decidimos atravesarla. Con lo primero que nos encontramos fue con un transcurso rocoso que hacía molesto el caminar. Este obstáculo no fue sufuciente para detener nuestra marcha. Luego de 3 horas de recorrer un extenso camino ya estábamos en la cima de la colina por lo que decidimos tomar un descanso. Merendamos y nos hidratamos para continuar nuestro recorrido, ya era de mediodía cuando nos encontramos cuesta abajo pero de un momento a otro Laila dio un paso en falso y cayó desprendida al suelo; yo al ver esto corrí para poder salvarla pero también caí. Ambos llegamos a otra superficie pero estábamos muy malheridos y lo último que vimos antes de desmayarnos fue a Mark gritando con gran desesperación.
Cuando desperté vi que me encontraba en una habitación que era la del centro pokémon; observé que estaba algo bendado y me dolía mucho el cuerpo pero con un poco de esfuerzo lluegué a la recepción en donde estaban Mark más la Enfermera Joy y estos se sorprendieron mucho al verme.

-Leroy deberías de estar descansando. Debes de encontrarte muy adolorido por la caída- dice Mark muy preocupado.

- La verdad es que me duele todo el cuerpo pero quiero saber como se encuentra Laila ya que ella calló antes que yo- digo preocupado por la salud de la chica.

- Traquilo, Laila se encuentra bien aunque igual de herida y ahora está en su habitación descansando- exclama la Enfermera Joy aliviando mis preocupaciones.

- ¿Y cómo fue que llegamos al Centro Pokémon?- pregunto mirando a Mark.

- Os salvó el líder de gimnasio de esta ciudad. De una forma heróica llegó con su Onix y al vernos vino a toda velocidad. Nos montó en la columna de su pokémon y ordenó que descendiera mientras que él bajo saltando de peñazco en peñazco con una gran cofianza y sin que ningún temor albergara su corazón- Mark contaba este suceso con gran admiración- Y luego nos trajo hasta aquí pero tuvo que marcharse al gimnasio. Es increíble sin duda es increíble, él es mi ídolo.

- Si que fue una gran hazaña aunque eso incrementa mucho más mis ganas de retarle y tener una atroz batalla. Y eso sinceramente será ahora- exclamé estirándome un poco.

- Amigo no estás en un estado muy conveniente para una batalla, te recomiendo descansar y luchar mañana- me responde Mark con razón.

- Bueno tienes razón y además ya es un poco tarde- dije algo triste por no poder tener mi combate en el momento en que quería.

Después de la pequeña charla volví a mi habitación y enseguida me quedé dormido. Cuando me desperté a la mañana siguiente mi cuerpo estaba casi en plena forma o sea que estaba mucho mejor. Como es normal realicé las labores matutinas y luego fui a buscar a los demás. Me sorprendió ser quien busca a los chicos pero cualquiera se puede quedar dormido una vez así que me dispuse a tocar la puerta del cuerto de Laila y el de Mark. Mark salió a los 2 toques pero Laila salió después de que tocase 5 veces.
Los 3 tomamos rumbo hacia el gimnasio; llegamos a este en 20 minutos y entramos. El recinto de batallas era increíble ya que tenía un segundo piso, gradas y un campo de batalla como el de los animes. Habían varias puertas pero ponían un cartel que decía que solo podían acceder a estas trabajores de lugar o sea personal autorizado. Esperamos unos minutos y llegó el líder, quien se sorprendió al vernos y preguntó como estábamos.

Pokémon: Nueva LeyendaWhere stories live. Discover now