Lo Aprendí De Ti

Capítulo 126

Pov Audrey

Me levanté de la cama y salí de mi habitación para ir a la cocina en busca de Elaine y Britt, me pareció un poco extraño no encontrarlas en la cocina porque ya era hora del desayuno y Britt nunca se pierde el desayuno

Audrey: ¿Britt?, ¿Elaine? –fui a buscarlas a la sala y no estaban ahí, solté aire– Deben seguir dormidas –no noté la hora a la que llegaron, fui a la habitación de Elaine pero no estaba ahí, parecía que ni siquiera habría dormido en su cama– ¿Britt? –golpeé la puerta un par de veces y al no escuchar ninguna respuesta abrí– ¿Britt? –sentí mi pulso acelerarse y mi corazón latir con mucha prisa, no estaban en el departamento y ni siquiera habían tocado sus camas; regresé corriendo a mi habitación en busca de mi móvil para llamarlas, sentí un vuelco en el estómago al pensar que quizás algo les había pasado–

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Pov Elaine

Fui a la sala y vi a Britt durmiendo profundamente abrazada a su desaparecido unicornio de peluche, después de año nuevo cuando regresamos a Boston me sorprendí al ver que no lo tenía con ella, creí que lo había olvidado en Ohio pero ahora me doy cuenta que Santana lo ha tenido desde ese entonces

Elaine: Britt –comencé a moverla suavemente y sonreí al ver como fruncía el ceño y trataba de cubrirse con las frazadas para seguir durmiendo– Britt

Brittany: Uh...

Elaine: Vamos a preparar el desayuno –hablaba en voz baja para no despertar a las chicas–

Brittany: No... –dijo en una especie de gruñido–

Elaine: Anda –soltó aire y se incorporó para quedar sentada en el sofá–

Brittany: Elaine...

Elaine: Anda Britt –sonreí de medio lado– Vamos –soltó aire y se puso de pie–

Brittany: Iré a darme una ducha primero, ¿de acuerdo? –asentí–

Elaine: De acuerdo, solo date prisa

–Diez minutos después regresó Britt, llevaba puestos unos pantalones de chandal y un hoodie un par de tallas más grandes–

Brittany: –Soltó aire y comenzó a abrir y cerrar las puertas y cajones de la alacena así como la nevera– ¿Qué en este lugar no tienen café?

Elaine: Quizás sea alguna excentricidad de Rachel –me encogí de hombros–

Brittany: No, se terminó –dijo sacando un frasco de café vacío– Ahora regreso –levanté una ceja al verla tomar las llaves de mi auto y salir del departamento, negué con la cabeza y seguí preparando algunos panqueques–

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Pov Santana