╰┄───➤ °♡•.1.2 ❦|Síndrome de Estocolmo ❦

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Pedido por: SkyCloud011

Temática: Lime/Romance/Secuestro

Pareja: Bakumomo

Sinopsis: ¿Qué harías si te enamoraras de tu secuestrador? ¿Estarías dispuesta a seguirlo hasta el fin del mundo?

Unas manos fuertes y duras  recorrieron el cuerpo desnudo de la chica, las palmas encallecidas del chico apretaron fuertemente sus pechos

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Unas manos fuertes y duras  recorrieron el cuerpo desnudo de la chica, las palmas encallecidas del chico apretaron fuertemente sus pechos. Él se comenzó a reír, el sonido era como un murmullo seductor, y con sus grandes manos le agarró las muñecas e inmovilizó sus brazos por encima de su cabeza.

—¿Me has echado de menos, mi niña? —le murmuró al oído y su cálido aliento le puso la piel de gallina.

Momo se quedó sorprendida, Bakugo nunca había hablado en sus sueños. De inmediato dio un grito ahogado y abrió los ojos, en la penumbra de la primera luz de la mañana lo vio claramente. Era él, no era una alucinación.

Desnudo y excitado, Bakugo estaba encima de Yaoyorozu mientras la sujetaba en la cama. Hoy tenía el pelo más alborotado de lo normal y su magnífico rostro estaba contraído por el deseo.

La chica se quedó inmóvil y levantó la vista, el corazón le latió con una desmesurada fuerza. Bakugo se abalanzó sobre ella y la besó, tragándose así su intento de hablar sobre el asunto en cuestión. Se apartó en el último segundo y al mismo tiempo empezó a introducir la punta de su miembro, que para ese entonces se encontraba erecto y palpitante.

Sin anticipo alguno a Momo se le escaparon varios gemidos.

—¿No queremos terminar antes de comenzar cierto? —le susurró el chico al oído.

En ese instante a Momo le daba igual todo y todos, solo quería disfrutar de su tiempo con Bakugo. Se moría de ganas de pegarle, de hacerle el mismo daño que él le hizo a ella al abandonarla por dos semanas. Si hubiera tenido un arma en ese momento no dudaría en pegarle un tiro por el suplicio que le ha hecho pasar.

Pero no tenía un arma, no tenía nada. Mientras tanto él seguía penetrándola poco a poco. Era como su primera vez juntos, salvo que el torbellino de emociones que Momo tenía en el pecho era mucho más complejo que el miedo que sintió entonces.

Cuando ya había acabado, él agachó la cabeza y la besó con ternura, como si se disculpara por tratarla con tanta dureza, siempre esta mezcla de crueldad y dulzura la descolocaba y la confundía aún más de lo que estaba.

—Lo siento —murmuró rozándole con los labios la mejilla—. Las cosas no tendrían que haber sido así, tenía que portegerte y no lo conseguí. No quería dejarte, no era mi intención.

Color Club Apple: Yaoyorozu Momo | BNHAWhere stories live. Discover now