Umbrella - Yeonbin [omegaverse] ©𝗺𝗶𝗻𝘆𝗼𝗼𝗻𝗽𝗮𝗿𝗸𝗺𝗶𝗻𝗻𝗶𝗲

Epílogo Prt. 1

Yeonjun se acercó un poco a la cuna mirándolo sobre ella. Era un bonito bebé gordito, mejillas levemente regordetas, manos regordetas y rojitas. Era una ternurita, su corazón latió rápidamente al darse cuenta del lugar donde estaba y no sólo eso, muchos recuerdos se le vinieron a la cabeza, pero antes de poder salir rápidamente de ahí, la puerta se abrió dejando entrar a un alfa con cabello naranja, alto y con bata. Sí, era Minjae.

Yeon tocó su cuello levemente, iba a reprochar, sentía el olor del alfa tan fuerte, le asustaba pero también le reconfortaba, su lobo se sentía bien y protegido, pero su lado racional estaba consiente de que estaba en un aprieto horrible.

–Antes de que saltes, por favor tranquilizate–El alfa se acercó un poco y Yeonjun sólo se retiro entre las cobijas.

Dejó la pequeña carpeta en la mesa y se sentó aún lado de las piernas de Min. –No vengo a asustarte, solo vengo a aclarar unas cosas...

Yeonjun abulto sus labios y recorrió un poco la cobija mirándole y poniendo atención. En ese instante estaba completamente sumiso ante su ahora alfa o eso es lo que creía.

–Yo te marque por qué perderías sangre y no resistirias una operación. Solo hice una marca temporal así que no te asustes, en una semana se irá y mi olor también...–

Min se ajusto de nuevo en la cama dejando a lado las cobijas –Dios Minjae, m-me siento culpable, tú...

–Yo no tengo planes con ningún Omega Jun, así que no hay por qué mortificarse, fue mi deber como doctor, mi deber es salvar vidas y eres mi amigo ¿No? Eso hacen los amigos –Sonrió y acerco su mano hacia la del Omega tomándola levemente. Yeonjun sonrió y asintió.

✨

Miró el cielo estrellado desde el umbral de su hogar. Su pequeño bebé se removió en sus brazos buscando su olor entre el suéter de color rosa pastel. Desde hace semanas que no era lo mismo y era normal.

Su bebé se despertaba cada hora pidiendo de comer y a veces lloraba en demasía por que, sabía, que le faltaba una parte y esa era su padre alfa.

Los padres de Soobin fueron al hospital un día siguiente de que nació el bonito Hoongjoong. Le trajeron pequeños regalos al bebé y unas rosas y se disculparon pidiendo estar en todos los pasos del bebé. Yeonjun los perdono con una condición, obtener ropa con el olor de Soobin para así calmar a su pequeño bebé.

Lo único que sabía de Huening es que él, ya había despertado desde hace unos días, y ya no lo había vuelto a ver. Solo esperaba que Soobin hiciera lo mismo y que pronto estuviera con ellos si es que de nuevo no lo rechazaba. Tenía fe y esperanza en que la madre luna se apiadaria de él.

Mesio a su bebé lentamente y tomó una de sus manitos que estaban entre unos guantesitos color azul pastel. El bebé parecía un muñequito, con un pequeño mameluco y un gorrito de un color azul.

–Bebé, ¿Qué tal si mañana vamos a ser a tu papá? ¿Quieres ir? –Preguntó y sonrió sin obtener respuesta más que una pequeña sonrisa del bebé de semanas de nacido que le dejó totalmente lleno de ternura –Yo también quiero verlo...

🍒

Tomó la pañalera y la ajusto a su brazo derecho, después, arropo a su bebé, pues el frío había sido demasiado intenso esa mañana y temía que aquello le provocará algún resfriado a su bebé.

Miró a su padre en la cocina y se despidió de él –Iré con Soobin papá –Beso su mejilla y salió de la cocina tomando las llaves del perchero y saliendo de la casa dirigiéndose hacia el hospital.

Cuando llegó los doctores y enfermeras le saludaron y empezaron a hacer pequeños cariños al bebé. Casi todo el hospital le conocía pues ya no sabía cuántas veces había ido hacia ese lugar y auque deseara ya no oler a medicina o algún químico de ahí, le reconfortaba que ellos estuvieran a su alrededor y lo apoyarán tal como lo hace...

–Minjae ¡Hey! –El alfa de cabellos anaranjados el cual estaba justo por irse en asensor paro las puertas a sus laterales y dejó entrar al Omega pequeño.

–Hola Junnie –Contestó con una sonrisa sin dejar de mirarle –¿Veniste a ver a Soobin?

–Sí, hmm, me dijeron que podría verle ahora y he decidido traer al pequeño Honnie~

Acercó a su bebé y le mostró una bonita sonrisa al alfa –Hoon bebé, saluda a Minjae.

El alfa solamente acercó su mano y empezó a hacerle pequeños mimitos a la cabeza cubierta por un gorrito de color amarillo al bebé.

Ya cuando llegó al piso indicado, las puertas se abrieron y Yeonjun se despidió de Minjae dando un beso en su mejilla. Se dirigió hacia la habitación y abrió la puerta con su mano izquierda.

La empujó con su espalda y cuando estuvo dentro la cerró con su pie derecho. Ahí estaba, postrado en una camilla conectado a una máquina y un olor a penumbra. Sus ojitos de gatito empezaron a lagrimear y mordió sus labios levemente –Binnie...

Se acercó hacia el quedando justo aún lado. Miró la mano de su alfa y la tocó levemente. No sintió nada, y sabía por qué, pero no quería aceptar la cruel realidad.

Dejó la pequeña pañalera en una silla y se dirigió de nuevo hacia la camilla –Binnie, traje a Honnie, E-el quería conocerte y creo que... Tu también quieres conocerlo...–No recibió respuesta pero si una lagrima –Solo... Despierta por favor, ambos te necesitamos –Dejo caer su lagrima sobre la mano de este y la apretó levemente.

La tarde se fue muy rápido entre el sombrío lugar, solo se disponía a mirarle y platicarle de ves en cuando cosas de su vida cotidiana. Llegó la noche y estaba dispuesto a irse, pero una tormenta fuerte llegó a la ciudad y eso significaba que no podría salir del hospital así que decidió quedarse esa noche ahí. Se ajusto en el sillón y Mesio a su bebé mientras le cantaba una bonita canción de cuna. Cuando este estuvo dormido, lo ajusto en el sillón y puso unas pequeñas cobijas a su lado para así no provocar un accidente. No se dio cuenta cuando sus ojos empezaron a cerrarse y como todo humano, el sueño le llegó.

Pero no noto una cosa, y esa era, la presencia de alguien la cual tomó a su bebé entre sus brazos.