Advertencia:
Esta historia contiene escenas de sexo duro y vocabulario fuertes, además de comportamientos abusivos, como violación, agresión, etc...por ello, si eres sensible a estos términos no continues. Sin embargo, quiero decir que no puedes olv...
Tras acostar a su hermosa hija, la cual ya había cumplido los tres años de edad, Saint regresó a la habitación con su alfa.
-Hola precioso, anda ven aquí, me muero por amarte.
Saint se subió a la cama y gateó hasta este.
Tras atraparlo y girarlo bajo suya, el alfa comenzó acariciarlo y besarlo, llenando así su ardiente piel, lo cual hacía que el omega temblaba de placer, suspirando aliviado por la suavidad y delicadeza con la que este lo tocaba.
A continuación Zee comenzó a chupar, lamer y morder sus redondos y rosados pezones, recorriendo así su pequeño y hermoso torso.
Sus pollas estaban duras y suplicantes de atención, así que el alfa cogió la polla de Saint y comenzó a marturbarla, mientras este jadeaba enloquecido por la agonizante sensación de placer que sentía.
Zee intensificó la presión de su mano y también la rapidez del movimiento, por lo que tras unos minutos el omega se corrió aliviándose así algo de dolor.
Este espero a que este recobrara el aliento y entonces le abrió las piernas del todo, se colocó entre ellas y comenzó a lamerlo de nuevo.
Saint estaba muy lubricado, así que ya no tuvo que prepararlo tanto, este se chupó un dedo y poco a poco lo introdujo en su agujero del omega, mientras se retorcía gimiendo.
Cuando Saint se tranquilizó, el alfa empezó a sacarlo y a meterlo varias veces a modo de penetraciones, este pedía más y más hasta que el moreno le introdujo un segundo dedo repitiendo la operación y haciéndolo gritar aún más fuerte.
Su polla estaba suplicante también, quería atención, así que Zee puso un brazo a cada lado de los costados del omega y se subió encima de él, besándolo y frotándose contra su bulto, simulando penetraciones y haciéndolos volverse locos de placer.
-Oh joder te nece-sito mi al-fa, mi al-fa-suplicó el omega en su locura.
Entonces Zee colocó su polla en la lubricada entrada de su omega y poco a poco la introdujo dentro de este.
-¡Oh joder eres tan gran-deee !, ¡Aaaaah... me vas a romper!
-Shsss... tranquilo ....aaah relájate, no pasa nada aaah- le susurró este muy sensual en el oído.
Zee con el tiempo y la práctica había aprendido a controlar su brusquedad, por lo que sus encuentros sexuales eran más placenteros para los dos y mucho más satisfactorios.
Este olisqueó delicado el cuello de Saint, el cual este dejó la vista y cuando el omega dejó de gritar, el alfa comenzó penetrarlo lentamente mientras le besaba y mordía sus hombros suavemente.
Este gemía sin control a cada penetración que el alfa le daba llenándolo por completo y calmando sus ansias, las penetraciones se hicieron más intensas y el alfa jadeaba fuertemente ante el frenesí que sentía en el interior del pequeño omega.
Zee sentía chocar su polla con la próstata del castaño y contemplaba con orgullo como bajo suya, éste suspiraba y gemía acaloradamente al borde de la locura.
El alfa lo penetró una y otra vez, sintiendo morirse de gusto pues era un no parar de sensaciones que lo transportaban a un lugar mágico de bienestar.
El omega por su parte también sentía su cuerpo desvanecerse por la intensidad que le provocaba tener al viril y hermoso alfa, metiendo su gran polla en él una y otra vez, estocada tras estocada, cada una más intensa, más profunda y más caliente que la anterior.
Ya desquiciado y eufórico por el tanto placer que sentía, no lo aguantó más y volvió a correrse en su vientre contrayendo su interior con leves espasmos incontrolados, que hicieron que el nudo del alfa se hinchara.
El alfa entonces sintió la necesidad de clavar sus afilados colmillos en el delicado cuello y finalmente lo marcó mientras derramaba su semilla.
El satisfecho Zee lamió la mordida varias veces para que cicatrizase más rápidamente, esperando a que su nudo bajase sin dejar de besar a Saint, ya que la boca entreabierta del agonizante omega lo volvía loco.
-Te amo
-Y yo te amo a ti.
Al terminar se bajó del omega que ya estaba más que relajado y casi se quedaba dormido por el cansancio, el cual esbozó una bonita sonrisa que lo volvió a derretir y se abrazó a él hasta quedarse dormido también.
(...)
En la mañana, Zee, Saint y su pequeña iban hacía el centro escolar, donde esta comenzaría el curso.
- Papi, ¿crees que haré muchos amiguitos en el cole?, estoy muy nerviosa.
-Claro mi vida.... Seguro que todos querrán ser amigos de una niña tan buena y linda como tú... No te preocupes.-dijo el omega acariciando el hermoso y negro pelo.
-¿Y tú papá?, ¿Lo crees también?.
-Por supuesto cariño, ya lo verás... Te encantará el colegio.-dijo el alfa sonriéndole.
-Ya llegamos señor-Dijo el chófer beta aparcando el coche.
-Bien vamos allá-habló Saint cogiendo la mano de su hija para bajarse.
-Adiós -se despidió la pequeña del beta.
-Adiós preciosa, pásalo bien.
Zee también se bajo y juntos acompañaron a su pequeña hijita hasta el interior de su clase, dónde pasaría muchas horas de su día a día a partir de ese momento.
La pareja estaba más que dichosa pues su pequeña era encantadora y sobre todo muy sana, la cual rápidamente ya hizo amiguitos.
Algo tristes se despidieron pues debían dejarla junto a los demás niños y su profesora.
-Portate bien mi cielo y diviértete mucho-dijo el omega limpiando las lágrimas de emoción que habían empezado a brotar de sus ojos y resbalaban por sus mejillas.
-Claro papi.
-Adiós pequeña.
-Chao papá.
Ese fue un emocionante y bonito día, el primero de muchos que le siguieron después en la vida de Zee, un alfa solitario y rudo que cambió por amor y de Saint, un prostituto omega que finalmente solo se preocupó de hacer feliz a su propia familia.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»
ESPERO QUE OS HAYA GUSTADO ESTA HISTORIA. A MI ME HA ENCANTADO ESCRIBIRLA, GRACIAS A TOD@S.
