⁰⁸ Géminis

1.3K 26 6
                                    

¿Qué sucedió con tu pasado?
¡Advertencia!
El pasado será según la especie (humano, demonio) y no aplica para todas las partes de la historia.

¡Hay spoilers!
Eres libre de correr el riesgo.

_______________

Géminis—.
Eras la hija menor de una amplia familia, específicamente, la familia Shinazugawa. No eran una familia perfecta, sinceramente, nunca te agradó tu padre, golpeaba muy seguido a tu madre y a tus hermanos, pero fuera de aquella situación, amabas a tus hermanos y a tu madre a más no poder.

Tiempo después, tu padre había sido apuñalado en muestra de rencor, no sabías exactamente quién, aún eras muy pequeña y no lograba asimilar varias cosas pero ese había sido el primer incidente de una cadena de desgracias. Durante la tarde, habías salido con tu madre a realizar compras para tus hermanos, caminas a su lado sosteniendo su mano para no perderte. La noche había caído y ya regresabas bastante feliz de ver a tus hermanos, pero nunca esperaste que ese día jamás volverías y nada volvería a ser igual. Un hombre de aspecto misterioso y ojos filosos, las había interceptado, tu madre no tardó en responder ante la posible amenaza intentando ganar tiempo para que huyeras. Aquel ser simplemente provocó una herida en tu madre y mientras te alejabas podías ver su cuerpo reaccionando de manera totalmente anormal, minutos después mientras al fin habías logrado perderte de ahí con tus lágrimas nublando tu vista, observaste a tu madre frente a tí, su aspecto no era parecido al de antes, largos colmillos salían de su boca, sus ojos lucían muy parecidos a los del otro hombre y las garras de sus manos eran tan largas que en cualquier momento podrían alcanzarte.

Tus rodillas golpearon el suelo mientras temblabas y detrás de tí una escalofriante sombra de pronto puso su fría y áspera mano en tu cuello apretando y consigo clavó sus garras.

Cuando creíste que la imagen de tu madre en ese estado sería lo último que verías, tu cuerpo se sentía ajeno, tu garganta ardía, tu estómago rugía y ya no emitías sollozos lastimeros, si no, gruñidos hambrientos, y las palabras de ese hombre fueron como un impulso indirecto de tu cuerpo.

—Es hora de ir a comer—.

KnY Zodiac Donde viven las historias. Descúbrelo ahora