KnY Zodiac

¹⁷ Piscis

¿Qué sucedió con tu pasado?
¡Advertencia!
El pasado será según la especie (humano, demonio) y no aplica para todas las partes de la historia.

¡Hay spoilers!
Eres libre de correr el riesgo.

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Piscis—.
Al igual que muchas personas que vivían cerca del Distrito Rojo, tenías una pésima vida. Tu padre solo era un alcohólico abusivo y tu madre una tonta, siempre tuvo la oportunidad de alejarse de ahí contigo, incluso él se lo pedía pero ella seguía aferrada a ese lúgubre lugar. Decidiste irte de casa por tu propia cuenta, sin embargo, las decepciones eran terriblemente constantes afuera. Muchos hombres te seguían como depredador al ciervo, las mujeres ser burlaban de tí, algunas sentían lástima, muchas veces te habían vendido, golpeado, maltratado y aquello te cansaba, estabas harta de todos, nunca habías conocido a alguien verdaderamente bueno, incluso habías tenido decepciones amorosas con un chico que solo te había utilizado como plato de segunda mesa porque no estaba conforme con su prometida.

Querías tirarlo todo por la borda, era tan repugnante por ese día superó lo que no creías posible, al menos no tan pronto, fue un descuido tuyo.

Varios hombres ebrios te habían visto como un manjar y sin dudarlo se aventaron hacia tí, te habían golpeado y pensaban ir más allá, estabas segura de que después de todo eso, te matarían. Ya no querías forcejear por lo que habías dejado que actuaran como quisieran ignorando las estúpidas palabras que salían de sus asquerosas bocas. Ya estabas sometida y uno de ellos estaba apunto de cumplir su acto atroz, sin embargo, lo único que tocó tus piernas fue un hilo de sangre constante. Tus extremidades fueron liberadas y abriste los ojos extrañada.

Muertos, estaban muertos.
Te reincorporaste observando a una mujer cuyas facciones eran de temer pero a la vez eran muy bellas. Seguramente te mataría así que solo bajaste la vista acomodando tu vestimenta medianamente desgarrada.

—Levántate— dijo arreglando las fajas que se encontraban apoyando su kimono en el exterior. Tú la seguiste, ¿qué más podías perder?

A partir de esa sangrienta noche, ella te hizo parte de la mayor casa del Distrito Rojo y al mismo tiempo, te adentró al mundo de los demonios con la aprobación de él.