Cariño... No eres indispensable Soukoku

Capítulo VIII

El tono tan cínico del castaño al despedirse era una total molestia y era entendible ya que él no estaba en la situación en la que gracias a un tipo desconocido te conviertes en un gato y aún peor que ese extraño se despidiera de ti cómo si fueran amigos de toda la vida.

Chuuya no sabía cuánto tiempo más podría vivir así, no había pasado ni una semana cuando ya se veía en serios aprietos gracias al trato que había hecho.

No sabía que hacer, quizá solo era un juego que pronto acabaría propinándole una buena broma o eso era lo que quería pensar, realmente no podía procesar el hecho de que la única manera de deshacerse de las orejas y su cambio a gato durante las noches fuera el encontrar el amor; era casi un sueño extremadamente surrealista para ser sinceros.

El pelirrojo no sabe casi nada del castaño, solo sabe que se llama Dazai y que nunca debió hacer un trato con el por más que esto estuviera siendo amenazado a muerte; no sabía dónde vivía, su edad ni mucho menos a qué se dedicaba pero si de algo estaba seguro el pelirrojo era que Dazai no podía ser una persona común y corriente.

- Oh mierda... - se decía para si mismo el pelirrojo tomando una copa de vino mientras se recostaba en un sillón que daba vista a la ciudad - Bah... Pero que tonterías, ¿amor? Yo no necesito nada como eso; además no es como si hubiera alguien de quién enamorarse -. - Quizá puedo intentar salir con Ranpo, aunque sé que sin decirle él sabrá lo que me está sucediendo, no por nada es tan buen detective -

- O quizá Fyodor... El también es una buena opción; aunque... ¿Por qué Dazai se habrá puesto así en el momento en que lo mencioné? Agh... No es como si me importara así que lo dejaré pasar -

- Si... Quizá Ranpo sea la mejor opción, tal vez en esta ocasión sí podamos enamorarnos... -

Después de meditarlo un rato, el pelirrojo decidió llamar a Ranpo para contarle lo que sucedía esperando su apoyo, el azabache de mala gana respondió hasta saber de qué se trataba su propuesta.

- Qué regresemos eh... - se escuchó decir del otro lado de la línea telefónica - Está bien, no es como si me desgustará estar contigo -

- Entonces cuándo podríamos vernos Ranpo -

- ¿Te parece bien hoy en la noche? -

El pelirrojo dispuesto a aceptar, recordó lo que sucedía cada que la noche caía por lo que tenía que proponerle al azabache solo encontrarse de día. Puede que levantará sospechas que solo fuera durante el día pero aún no estaba dispuesto a arriesgar su secreto

- Esto... Lo siento Ranpo pero ¿Podría ser durante el día? Tengo algunos inconvenientes por la noche-

- Bueno, entonces veámonos mañana -

- Te agradezco que hayas aceptado darnos una segunda oportunidad... Aunque prácticamente tu y yo solo éramos amigos con derechos -

- Jaja muy cierto Chuuya, me imagino que esta vez quieres formalizar, pero es mejor que hablemos de esto mañana, nos vemos -

- Adiós - Al terminar la llamada, Chuuya sentía que una gran carga había sido retirada de sus hombros. Pronto podría eliminar su problema y jamás tratar con Dazai.

La suerte de Chuuya no podía ser peor, justo cuando iba a desayunar en una pequeña terraza que solía frecuentar ya que estaba cerca de la agencia se volvió a encontrar con el castaño quién no paraba de llamar la atención de los comensales por su apariencia.

- Chu Chu que bueno verte por aquí - dijo el castaño al ver a Chuuya

- Shh... Baja la voz, las personas se molestarán Dazai -

- No es como si me afectara sabes, las personas suelen observar a todos y cuando empiezan a criticar es por qué en el interior anhelan poder ser así de libres, por lo menos no es novedad para mi que me miren así -

- Yo también se que es estar en el ojo de las personas, pero por favor no los molestes, ellos están aquí para disfrutar su comida -

- Bah... Está bien. Entonces... ¿Ya encontraste a alguien para deshacerse de tu "pequeño problema" -

- Deja de hablar así, si tú fuiste quién me metió en todo ésto, yo podría seguir siendo normal si no fuera por tu culpa - respondió el castaño mostrando molestia en su rostro - Pero para que lo sepas, así es, ya he encontrado a alguien y de hecho vine para encontrarme con el así que porfavor alejate -

El rostro de Dazai no pudo evitar realizar una mueca de asombro ante las palabras del pelirrojo, pero evitó sentir frustración al saber que su comentario sarcástico no iba como quería.

- Oh vaya... ¿Y acaso tendré el honor de saber quién es? -

- Es algo así como un exnovio, su nombre es Ranpo Edogawa, deberías conocerlo ya sea por su trabajo como detective o como su pasatiempo siendo modelo -

- ¿Te refieres al niño molesto de ojos verdes que se cree lo mejor que puede existir? ¿Es en serio? ¿Habiendo tantos hombres o mujeres o lo que te guste lo elegiste a él? - el castaño no pudo contenerse la risa al saber de quién se trataba, lo hacía obviamente para molestar al pelirrojo.

- Se que Ranpo tiene sus defectos, pero es mucho mejor persona que tú, él no va por la vida burlándose de los demás. Además, para tu información soy gay y no tengo ningún problema en que el mundo se enteré -

- Uy lo siento... No creí que fueras a molestarte tanto por mi comentario inofensivo, solo quería hacerte reír -

- Pues no lo lograste, así que te pido que te vayas ahora porque Ranpo está por llegar-

- Muy bien Chu Chu, nos vemos pronto -

Dazai por dentro tenía un mal sabor de boca por lo que acababa de hablar con Chuuya, no quería realmente que encontrará la solución, o por lo menos no con alguien que no fuera él.

- Si supieras cuan estoy enamorado de ti Chuuya... Espero algún día lo notes - murmuró para si mismo mientras se alejaba de la mesa en donde se encontraba Chuuya.

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Nota de autora toda mensa:

Si tienen algún comentario o sugerencia respecto a cómo se está desarrollando la historia por favor háganmelo saber, realmente estoy buscando una manera de hacerlo más entretenido para ustedes así que cualquier consejo me sería de gran ayuda para mí.

Sin más que decir me despido por hoy.

Recuerden tomar awa y dormir bien :3