Ser secuestrada es genial para aliviar el estrés

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En su primera vida decir que no era una entusiasta del ejercicio era como decir que el café era sólo una bebida más, exacto un eufemismo, ya que es mundialmente conocido el hecho de que el café es vida, amor y todo lo bueno y santo en este mundo,—Muy bien ya establecimos que tenía una relación poco saludable con el café, pero para este punto en su ¿Existencia? ¿Vidas? No iba a cambiar —   pero volviendo al punto, el ejercicio no era lo suyo, hasta que renació y estuvo obligada a realizar rutinas diarias por años, las cuales incluso después de dejar a su familia se quedaron con ella, quizás no con la misma intensidad pero mantenía ciertos hábitos.

Correr cuando se sentía algo estresada era uno de esos hábitos.

Luego de una semana de trabajos, y pruebas, el viernes cuando el sol se escondió se cambió de ropa para comenzar con su rutina de ejercicios. Ahora una regla no hablada en gótica era que si eras una mujer ligeramente atractiva, salir un viernes por la noche —o cualquier noche en realidad si no tenías suerte... Dios está ciudad era horrible, porque alguien querría voluntariamente vivir en ella estaba por sobre Ange — sola era como pasearse en medio de una jauría de sabuesos con un pedazo de carne colgando del cuello,en pocas palabras: una idea terrible, excepto si eras una asesina entrenada, en ese caso bueno... Era una forma de relajarse.

Durante su corrida se paro a la mitad en un punto ciego y cuando unos brazos la arrastraron no peleó, llevaban siguiéndole una semana así que decidió finalmente darles una oportunidad. Usualmente le preocuparía ser seguida u observada por tanto tiempo, pero debido a que sus habilidades de espionaje dejaban bastante que desear no existía forma en que fuera la liga, por lo que era seguro —o seguro para ella al menos, de nuevo asesino de la liga de las sombras aquí, nieta del demonio y posible hija del murciélago de Gótica —.

Las ataduras en sus muñecas le daban algo de comezón pero aún no podía quitárselas ya que Kirk —como le apodo en su cabeza al jefe de los secuestradores, lo que debería ser un gran honor dado a que el capitán de la Enterprise era un bombón— estaba dando su discurso, y hasta no terminar de escucharlo no era de buena educación comenzar a patear traseros, siempre se preguntó si los villanos practicaban sus discursos al espejo antes de tener su charla con los héroes, tal vez le preguntaría a Kirk una vez terminará.

— Mientras te portes bien, y tu padre pague el dinero del rescate nada pasara y saldrás sana y salvo de aquí ¿Entiendes? — Pregunto el sujeto vestido de negro con una máscara de Jason de la película de viernes 13 cubriendo su rostro ¿para intimidar? En otra vida estaba segura que se habría sentido muy intimidad así que les daba una estrella dorada por el esfuerzo.

— ¿Esto es solo por el dinero?

—¿que?

— Es decir ¿solo quieren el dinero de mi familia? — Interrogó nuevamente y el criminal Asintió lentamente como si no entendiera la pregunta. — Un alivio. — Suspiró, aunque sabía que era muy seguro que no fuera nada más peligroso si la hacía sentir mejor, ahora finalmente podía rascar sus muñecas.

La bodega donde estaban era iluminada por una sola ampolleta colgando del techo, el único que parecía tenér un arma de fuego era Kirk, así que el era la mayor amenaza, cuatro personas dentro y dos afuera, por su lenguaje corporal ninguno parecía depender de algo más que cuchillos y fuerza bruta, en pocas palabras, una forma segura y rápida de aliviar el estrés y mantenerse en forma.

— Vamos a llamar a tu padre y todo esto terminará pronto. — Aseguró Kirk y ella tan solo Asintió antes de soltarse de sus amarras y levantarse de la silla tomando su arma mientras pasaba a su lado, todo en movimiento tan fluido y natural a la vez que rápido que dejó estupefactos a los delincuentes, ahora Ange quería sentirse bien por eso, pero esto era nivel estándar en la liga.

— Más rápido de lo que crees. — Sonrió disparando le a la ampolleta antes de que cualquiera de los hombres en la habitación pudiera reaccionar.

Algunos gritos, quejas y otros sonidos se dejaron oír y cuando la puerta fue abierta por los que estaban cuidando afuera algo de luz entró pero sólo habían cuatro cuerpos en el piso, en cuanto entraron la puerta se cerró detrás de ellos y la oscuridad junto con los gritos volvieron.

— Ya que fui educada y escuché todo tu discurso tu escucharas el mío ¿esta bien? — Pregunto Ange a Kirk que estaba atado a la misma silla donde antes estaba sentada, su máscara ya no estaba dejando ver unos asustados ojos marrón junto con un calcetín en su boca que le impedía hablar.

— Mhmmm — Asintió con la cabeza viendo su arma en manos de la chica.

— Muy bien. — contestó quitándole el seguro al arma. — Desde ahora se mantienen alejados de mi y mi familia, pero si escuchan aunque sea un rumor con su nombre me lo dices, para eso tomé el celular de uno de tus amigos. — Señaló a uno de los cuerpos en el piso. — Ninguno está muerto, por si acaso, pero si me entero de que han sido traviesos y no hacen lo que les pido. — Una sonrisa se mostró en su rostro y el cañón del arma le apunto directo a la frente. — No hay segundas oportunidades. — jalo el gatillo y el mayor grito prácticamente mojando sus pantalones hasta que noto que seguía vivo. — ¿entendido?

— ¡Mjhmmm! — Asintió de forma frenética con la cabeza llorando de alivio cuando ella bajó el arma dejándola en su regazo.

— Por si acaso, me llevó tu billetera este lugar esta muy lejos de mi casa y es peligroso para una señorita caminar de noche sola por gótica lo entiendes ¿no? —Kirk volvió a asentir y ella se despidió saliendo de la bodega con billetera en mano.

Ese día volvió con 40 dólares a casa después de pagar el taxi, salir a dar un paseo en la noche en ciudad gótica no siempre era una mala experiencia.

En contra del ClichéTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang