Día 10

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Los suaves rayos de sol entran por la ventana empezando a abordar toda la habitación, iluminándola poco a poco, cayendo encima de dos cuerpos desnudos en una gigante cama, Hiccup puede sentirlos sobre sus ojos logrando que su sueño se esfume, maldice entre quejidos, no queriendo levantarse, apenas abre los ojos con las pocas fuerzas que tiene en ese momento y lo primero que encuentra es el cuerpo dormido de su amada, con sus cabellos rojizos por todas partes algunos sobre su cara, Hiccup abre un poco más los ojos para contemplarla mejor, descansando, con la cobija tapando de la cintura para abajo y los brazos a los lados de su cabeza, todo un desastre de chica dormida pero para Hiccup siendo la obra de arte que no merecía.

Él se acerca y abraza su cintura, depositando un pequeño beso en su mejilla, después se acerca a su cabello para recargarse en el, siente como Merida se mueve, se esta despertando, se voltea dándole la espalda, Hiccup se acerca más y da otro beso, la abraza más fuerte para sentirla más cerca, queriendo más de ella.

Merida ya esta despierta y esta malhumorada porque a sido Hiccup quien la a despertado, se gira a verlo con el ceño fruncido pero solo recibe un beso perezoso en su boca y su enojo ya se a ido. Ella se recuesta sobre su espalda y deja que Hiccup llene de besos su boca, lentos, aún medio dormidos pero con todo el amor del mundo.

—Deberíamos levantarnos.

—Deberíamos- afirma Hiccup.

Pero él simplemente ignora todo a su alrededor y vuelve a besarla.

Mericcup Month 2020Where stories live. Discover now