Al abrir los ojos estaba en el suelo, arrodillada y con las manos encadenadas a un pilar en medio de un salón, tenía la respiración agitada preparándose para lo que sabía que venía, lo que le harían. El resto de los niños que eran cuatro la rodeaban obligados a ver su castigo.
Su corazón latía con fuerza listo para soportar el dolor, Jade ya tenía ocho años y sabía las reglas; sabía cómo comportarse y que debía mantenerse en silencio cuando uno de esos humanos lastimaba a alguno de sus compañeros, pero la tarde anterior no lo hizo.
Un nuevo entrenamiento estaba en marcha con ellos, pero resultaba difícil para muchos, solo unas horas antes de estar encadenada había siete niños y en su mayoría fallaban en sus movimientos, en sus blancos designados, así que Señor, Mike y otros como ellos se estaban hartando de lo que llamaron estupidez. Siempre iban vestidos con una camiseta gris y pantalones verdes con sus botines negros relucientes.
Tratar de controlar sus poderes a tan corta edad era muy complicado, pero aquellos humanos anhelaban que ya los usarán a su beneficio, un chico quería manipular el metal de sus grilletes y otro chico luchaba contra sus propios poderes debido a que podía crear ilusiones, pero hasta ese momento solo se confundía ilusionándose así mismo. Jade había intentado usar los suyos, pero no podía, algo no se lo permitía, de sus manos solo salía una especie de humo azul brilloso y con ello podía mover objetos a voluntad, por supuesto que eso no era suficiente para sus captores.
Error tras error, solo hacían terminar con su paciencia lo que provocaba que comenzarán a golpearlos en busca de resultados.
Cada Puro posee la capacidad de controlar más de un poder, pero todos ahí sabían que los usarían en cosas malas, no hacían más que fingir que no podían; solo querían aprender y así poder huir de ese lugar, soportarían lo que sea que les hicieran hasta ser capaces de controlar sus poderes.
Los golpes fueron demasiado lejos cuando otro niño cayó muerto, Jade simplemente enfureció. Los humanos se habían ganado su odio desde el momento en qué llego a esa prisión, no podía seguir viendo como sus amigos caían uno por uno y no de manera digna, sino con desgracia y dolor. No pudo contenerse más y con gran agilidad congeló el suelo donde estaban parados aquellos hombres y mujeres que seguían acabando con lo poco que quedaba de su pueblo.
En cuanto los atrapó de los pies ellos comenzaron a tambalearse, Jade aprovechó creando picos de al menos un metro de alto alrededor de ellos así, sin importar hacia donde cayeran serían atravesados y funcionó en cuatro humanos mientras que los otros habían logrado equilibrarse, pero eso no la detuvo, quería lastimarlos como lo hacían con ellos.
Sus compañeros se paralizaron al verla pelear, ninguno tenía el poder suficiente aún, pero Jade parecía hacer justo lo contrario, sin ningún tipo de titubeo y moviéndose por el salón y esquivando a Señor lanzó espinas de hielo hacia ellos matándolos lentamente, dejándolos sangrar. Vivir entre el enemigo no solo te muestra su fuerza también te ayuda a conocer sus debilidades, el cuerpo humano es frágil, demasiado en ciertas zonas y ella disparó justo a los órganos que les causaría dolor, pero sin oportunidad de salvación. Señor le disparaba balas, pero las que lograban llegar a ella las sacaba tan pronto entraban y comenzaba a regenerarse, no la quería matar, solo herir.
Logró acabar con otros dos, un hombre y una mujer, pero no pudo continuar debido a una fuerte descarga que le recorrió todo el cuerpo haciéndola caer y deshaciendo su hielo; cayó sin poder moverse, vio a Señor acercarse y junto a él su puño que se estampó en su rostro dejándola inconsciente.
Esperaba la muerte, pero no fue así. Al despertar notó la ausencia de varios de sus compañeros aquellos que habían matado a golpes y los otros cuatro que quedaban rodeándola.
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Guardianes: La Espada Ulfberth
FantasyCOMPLETA *CONTINUACIÓN DE "EL LEGÍTIMO REY"* La paz reina en Rixtor luego de las batallas libradas en el invierno pasado. Mientras el Demonio lucha por recuperar su poder con ofrendas Aiden, Jade y sus allegados buscarán una manera de acabar con él...