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El tener un momento de tranquilidad era algo casi imposible para Shirou, si no estaba asegurándose que de nada malo ocurriera en Anima City, sumando el hecho de que técnicamente ahora tenía que cuidar la mitad de su tiempo a una adolescente revoltosa, no era la manera más conveniente de tener un momento de descanso.
Aún así, el lobo ártico no se queja realmente de los pocos momentos de paz que llegaba a obtener, la mayoría del tiempo en el que estaba en un ambiente sereno le hacía divagar mucho.
Y si algo había aprendido alrededor de sus mil años de existencia, era que solo necesitaba un lugar sumamente tranquilo para pensar en cosas demasiado desagrables para su gusto. Por lo cual no solía quejarse tan seguido no tener tanto tiempo de descanso, era eso, y aparte de que el no requería descansar como un Beastman común.
Si alguien le hubiera dicho a Shirou hace años que llegaría el día en el que podría gozar de un momento de paz sin tener malos recuerdos de su pasado; probablemente lo tomaría como una broma cruel o algo imposible para el.
Sin embargo ahí estaba ahora en su oficina, sentado en su sillón con cierto albatros acostado en regazo, mientras la habitación estaba sumida en un silencio cómodo para ambos Beastman.
Lo único que estaba haciendo Shirou era jugar un poco con el cabello de Pingua, y darle caricias, ya sea en su rostro o su cabello. El moreno solo reía con ternura al sentir las manos del albino en su cara mientras había un sonrojo en sus mejillas.
El lobo ártico no tenía ni la más mínima en hacer peinados, a decir verdad, solo se encontraba tonteando con el cabello del albatros. Aún así, decidió simplemente hacerle una trenza simple, sin decirle esto a Pingua.
Duro varios minutos así, trenzando las hebras castañas de su pareja. - Termine... - comento el albino mientras alejaba sus manos del cabello del moreno.
El albatros se llevaron con cuidado del regazo de Shirou, para apreciar la trenza que había hecho el lobo ártico. - ¿Una trenza?- preguntó mientras observaba a su novio con curiosidad.
- Creo que te vez bien así - murmuró Shirou con algo de vergüenza mientras evitaba tener contacto visual con Pingua. -Puedes quitarte la si no te gusta -
- Oh no, está bien, en realidad, me gusta mucho, y más si tú la hiciste- confesó en albatros para dejarle un beso en la frente del albino, mientras que le acariciaba su cabello.
Shirou podía apostar a qué ahora mismo estaba sonriendo como tonto, ¿Cómo podía Pingua podía hacerlo ser un desastre con un simple beso? Aún no lo sabía, pero nunca se quejaría de los besos o caricias que este le proporcionaba constantemente.
"Día Dos: Caricias o Toques ✓✓"
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🍒Notitas🍒 Es la una de la mañana en pleno sábado, no tengo internet, así que cuando actualice está wea por fin tendré internet o por lo mínimo datos (lo cual probablemente sucederá en noviembre) ;;;
Ahora, de una vez les aclaro que en esta cuenta solo hay puras cosas fluff de estos dos vatos (y de vez en cuando triste quien sabe vdd). Una disculpa pero así es como trabajo 🤧👊 Atte: Chxrry_Gloss
