El Amor De Mi Perdición

Capitulo 2: un acto de valentía

- Sabes muy bien lo que conlleva tratar de acercarme a esa niña nueva CJ.

- ¿y qué harás?... ¿Seguirás detrás de tu muro de protección? O ¿decidirás ser valiente y acercarte a ella?... CJ se veía confundido.

- No lo sé en verdad no quiero que ella trate de humillarme, raro a sido que este día lunes ha estado tranquilo y sin problemas.

- Debes dejar ese miedo Alex no te hace bien en nada... Al escuchar eso fue como un choque eléctrico en mi cerebro.

- ¿Miedo?, No salgas con eso del miedo, sabes bien que he tratado de ser lo mejor posible en esta pocilga de colegio y aún así mi vida es una tortura diaria y si necesitas pruebas mírame los labios, ¡están rotos!.

- Lo sé y entiendo todo lo que has pasado, recuerda que soy el único amigo que tienes desde el preescolar Alex.

-  Jhon lo sé, se que eres mi único amigo y mi hermano aunque no tengamos la misma sangre.

- Oye Alex este es mi consejo acércate a ella invítala a charlar, ¿qué es lo peor que puede pasar?.

- ¿Qué se una al club de los bastardos, no crees?.

- No sabes si lo hará o no, ya de todos modos tu vida aquí sabes que no va a cambiar, aunque tenemos 10 años entendemos eso bien.

En ese momento me dio mucha rabia, pero CJ tenia Razón por más que me esforzaba no lograba cambiar nada para que mi situación en esta escuela mejorara y las humillaciones pararan.

- De acuerdo trataré de acercarme a ella.

- Eso hermano tú puedes, ¡vamos!.

Estábamos en la biblioteca de la escuela cuando hablábamos CJ y yo, luego al salir de allí me decidí ir a buscar a la niña nueva, pero no la encontraba en ninguna parte. Pensé que se habría ido de la escuela ya que la biblioteca era lo último de nuestro horario.

Sin embargo...

Luego de pasar cerca de los baños de el segundo módulo escuche ruidos dentro de uno de los cubículos del baño de niñas.

Temeroso, entre lentamente y en silencio.

- ¿Hay alguien aquí?... Pregunté temeroso e intrigado por lo que sea que estuviese allí dentro en ese cubículo.

Escuché la voz de Aleisha pero no era clara no supe lo que decía, hasta que abrí la puerta del cubículo donde ella se encontraba.

La encontré con las manos atadas en su espalda y la boca amordazada por un trapo... Rápidamente me apresuré a ayudarle, liberé sus manos de las ataduras y luego le ayude con el trapo que tenia en la boca

Cuando quedó libre me abrazó rompiendo en llantos, me sentí mal por ella, porque una niña tan hermosa como ella no debía llorar, o al menos eso creía de las enseñanzas que me transmitía mi madre cada día.

Con respecto a Aleisha sentí como sus llantos rompían mi corazón no quería que sintiera lo que es ser mal tratado por unos imbéciles, así que solo me quedé allí sentado afuera del cubículo en el baño de niñas abrazándola hasta que pude hacer que se calmara.

Ya Aleisha estaba más tranquila cuando salimos del baño.

- Oye ¿Cual es tu nombre?... Aleisha me preguntó curiosa.

- Mi nombre es Alexander... respondí amablemente y brindándole una sonrisa de lado.

- El mío es Aleisha.

- Es un placer conocerte Aleisha. Ahora dime, ¿quién te dejo así en el cubículo del baño?.

- Fueron dos niños de 6to grado, ángel y Jeison.

- Ya veo y ¿que hiciste para que te tratarán así?.

- No lo sé, ellos solo lo hicieron.

- Tranquila solo apártate de ellos y no te harán nada.

- Gracias por tu ayuda Alexander.

- Puedes llamarme Alex solamente, si así lo deseas Aleisha.

- Tu puedes llamarme Shasa así me dicen en mi casa mis padres y hermanos.

- De acuerdo Shasa, algún día tengo que conocer a tu familia, ¿te parece?.

- Si claro no estaría mal.

Recuerdo que ese lunes la acompañe hasta su casa y para mi "rara buena suerte" vivía unas cuadras más abajo que yo, fácilmente podía ir a visitarla en mi bicicleta.

A los días siguientes de la semana me encargaba de ayudar a Shasa en todo lo que pudiera y a veces CJ nos acompañaba... Realmente me estaba apegando mucho a ella y la consideraba mi amiga me sentía cómodo estando con ella.

El fin de esa semana para Shasa (después de el incidente en el baño) fue lo más tranquila que pude ayudarla a hacer.

Pero me costó muy caro el que la semana de Shasa pudiese estar normal... Ya que el día miércoles después de que Shasa fue a almorzar busque a Jeison y a Angel, tenía miedo, pero por Shasa haría lo que fuera ya que era mi única amiga y la única niña del salón que no me trataba mal.

Flashback.

Narra Jeison...

Estaba en los balcones de la escuela con Ángel a mi lado como era de costumbre, cuando a lo lejos vi al gordo estúpido de Alex acercándose a nosotros.

- ¡Oigan ustedes dos par de idiotas no quiero que se acerquen de nuevo a Aleisha!. ¡Ni piensen en hacerle daño nuevamente!... Oí a Alex mientras se acercaba rápidamente hacia nosotros.

- ¿Qué te pasa? ¿Estás loco? o ¿quieres que te golpeamos nuevamente?... respondió Ángel amenazándolo. 

Ángel no había terminado de hablar cuando el regordete de Alex lo golpeó muy fuerte en la cara (juraría que ese golpe le dolió a Ángel), sin embargo Ángel y yo después de eso entre los dos le dimos una paliza.

Dejamos a Alex muy golpeado en el suelo de los balcones, pero aún así dijo casi sin poder respirar "¡no quiero que se acerquen más a Aleisha yo soy quien la protege!".

Ángel notó que en su cara se había marcado un morado del golpe que recibió de parte de Alex molesto le pateó la cara y lo dejó inconsciente diciéndole.

- ¿¡A quién proteges si no puedes cuidar si quiera de ti mismo!?.

Nuevamente le habíamos vuelto a humillar a ese gordo y esta vez fue él quien se lo buscó, debo admitir que a veces me daba lástima golpearlo y humillarlo pero se me pasaba golpeándolo más fuerte y viéndolo retorciéndose de el dolor que le causábamos.

Sin embargo era la primera vez que se nos enfrentaba y todo para proteger a la niña nueva de su salón, eso me dejó intrigado ya que no le había visto con nadie más que ese doble cara de CJ al que él considera su hermano, lo que me decía que esa niña nueva es importante para el y debo admitir que quería saber que tan lejos podía llegar por protegerla.