Correr (41)

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Damiana

Muy temprano me levanté y me aliste para venir al colegio, me sentía con energías.

-¡Dam! - Una feliz Náyade llega feliz y se me tira encima a abrazarme.

-¿Porqué no has venido a las primeras clases? - pregunto.
-Me dormí - dice encogiendo sus hombros.
-Los profesores han preguntado por ti - digo empezando a caminar por el pasillo.
-Estamos empezando el segundo mes para la siguiente nota ¿No te preocupa? - exclamo.
-Lo se, pero con mi sobre inteligencia podré pasar todas las materias - Lo dice muy normal que por poco me lo creo.
-¿Estás lista para física hoy? - Pregunta, bueno hoy tenemos que correr, hacer ejercicios y luego un partido de voleibol.
-Supongo, hoy ando con energías - asiente sonriendo.

Se queda mirando a un punto y enseguida señala.
-Mira ahí viene tu galán - giro a mirar y es cierto, pero no viene solo, si no con una chica con lentes, vestido de flores y cabello lacio, ambos conversan animadamente.
-¿Quién es ella? - pregunto curiosa.
-¿Celosa?
-¿Porqué debería?
-Ella fue una de las tantas novias de Aren - ¿Bromeas? - pregunto con una ceja arqueada.
-No, fueron novios cuando estuvieron estudiando, ella iba un grado menos de él y como todos sabían Aren era algo mujeriego y insaciable, a él no le importaba que fuera de primer año, él salía con ellas - A puesto que si lo hubiera conocido en ese entonces me hubiera caído mal, no me gustan los hombres mujeriegos, pero cuando lo conocí ya no era así, supongo.
-¿Ahora que hace ella aquí?
-Oh es la secretaria del director, ella es muy tímida y calmada, casi nunca se le ve la cara solo si vas a la recepción por alguna copia o horario - explica Náyade. Aren y ella se pierden en otro pasillo que va a las escaleras para subir al otro piso.
-¿Porqué se dejarían?
-No lo se, ella era una nerd algo así, fue como algo típico el popular con la nerd - lo último lo dice con voz graciosa.

***

-¿Lista para correr Damiana? - Como odio a Keane, tiene una sonrisa sarcástica y me dan ganas de lanzarme y pegarle un buen golpe, se que suena agresivo, pero se lo merecería

-Nací lista - respondo, no me dejaré humillar por él. Me lo advirtió días atrás con lo de la comida.

-Bueno, espero hoy no termines cansada y puedas hacer cosas sucias con Aren - Le saco el dedo.
-Búscate una vida y deja de meterte conmigo - respondo.
-Me gusta mucho verte molesta, pero más gracia me da es verte con esa cara de sufrida cuando corres - Mas tarde estaremos tomando café por culpa de Keane, y yo estaré llevando flores negras para su funeral.

Todos empiezan a llegar y Náyade y Quinn vienen conversando animadamente.

-Chicos, chicas no perdamos tiempo y empecemos a calentar esos cuerpos - Dice Keane por lo alto llamando la atención de todos mis compañeros.

Todos empezamos hacer algunos ejercicios de calentamiento. Siento una mirada sobre mi, giro un poco mi rostro y encuentro a Aren desde las escaleras mirándome.
Se muerde el labio inferior, una sonrisa se transforma en mi rostro y le saco el dedo corazón, lo veo sonreír de la misma manera y sacar su dedo también, mientras me presta atención hacer ejercicio.

-Damiana te pondré hacer más ejercicios si sigues perdiendo el tiempo - gruñe Keane, lo fulmino y sigo haciendo ejercicios con la mirada encima de Aren.

-A correr - A penas estoy comenzando el segundo mes hoy y el anda de exigente. Días atrás estaba enferma y luego estaba comiendo como loca según ellos y lo sigo haciendo, solo que ya no tanto como antes.

Empezamos a correr algo lento, Náyade me odserva, su respiración es calmada a contrario la mía que va un poco más rápida.

-No trates de correr al igual que los demás, se te entiende que eres una persona sin ningún tipo de ser sobrenatural - no le digo nada, es verdad, no tengo poderes y solo soy una humana que no me puedo comparar con ellos a su ritmo. Pueden correr un maratón de diez vueltas en menos de cinco minutos y siguen con una respiración normal. De mí podría decirse que me comparan con un anciano al correr, jamás los alcanzaría a todos.

Empiezo a llevar el ritmo más acelerado cuando Keane le pide a todos que corran más rápido, no quiero que me vean débil, aunque todos lo piensan, pero quiero demostrar mi capacidad.

Un chico con lentes va al lado derecho mío y va respirando normal.
Ves lo que digo.

Mi paso se acelera más, logro alcanzar a un par de chicas, estas me sonríen amables y siguen su trote, sigo acelerando alejándome de ellas y tratando de correr más duro.

Tal vez en el colegio que iba, podía tener bastante potencial para correr, pero aquí jamás lo sabré.

-Damiana te terminarás cansando si sigues así - escucho que me dice Náyade atrás de mí.
No le respondo y sigo corriendo, algo dentro de mí me dice que siga y esas ganas intensas de correr sin parar las puedo sentir, hasta que no resista.

Mi cuerpo ya lo esta haciendo por voluntad propia y no por mi cuenta, sin embargo siento que ya estoy llegando al límite, mis piernas se mueven solas si.

Voy mirando borroso, me siento mareada y ya no puedo resistir tanto, puedo sentir que corrí un maratón, aquella fuerza que sentía ha desaparecido y ahora puedo estar segura que me estoy desplomado en el suelo.

Escucho la voz lejana de Náyade y incluso de Keane, puedo sentir caer sobre el duro suelo y perder mi conciencia.

Espero les haya gustado, esta algo corto, pero lo tenía que hacer así o si no nunca terminaría sin seguía.

♥️🐺

El castigo de Damiana👑✅(Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora