🔥Prólogo🔥

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Gemidos...
Gritos...
Lloriqueos de placer...
El sonido de la piel humeda siendo azotada con fuerza...

Todos esos sonidos inundaban a mas no poder la mansión de el héroe mas reconocido de Karmaland, Vegetta.

—Mas! Mas! Dame mas maldita sea! —gritaba entre las sábanas un hibrido de oso, de piel blanca y cabello teñido de rubio, el cual era empujado sin ninguna piedad contra la cama del dueño de aquel hogar

—muevete mas duro zorra! Es todo lo que puedes hacer con eso que tienes entre las piernas? Dame mas anda! —decia entre gemidos un chico de piel igual de blanca que la del hibrido, de cabello castaño y complexión delicada

Aquellos quienes dominaban, tiraban y embestian sin piedad a sus amantes estaban cansados de ésa situacion. Pero no podian hacer nada para solucionarla.

Los gemidos subieron mas de tono hasta alcanzar finalmente aquel deseado clímax que anhelaban los chicos que reposaban en la cama con sus ojos cerrados permaneciendo jadeantes y extasiados por todo el placer que se les habian brindado.

Mientras tanto sus parejas los miraban repulsivos, asqueados, hartos de todo, hartos de esta misma rutina que se daba casi dia tras dia.

Tan pronto apresiaron aquellos rostros molestos, soltaron una carcajada burlandose de su pena y su coraje.

—owwww que pasa "Vegettita"? —dijo sarcástico el hibrido abriendo sus ojos y dirigiendo su vista a su pareja, mirandolo con aquellos orbes rojos como la sangre que poseía—acaso no te gusto?

El mencionado no dijo ni una palabra solo giro su rostro a un lado y evito hacer contacto visual con el chico.

—que hay de ti "Auroncito"? —esta vez hablo el castaño manteniendo el mismo sarcasmo que su compañero y, al igual que este, posando sus ojos igual de rojos en su amante —mi apretado interior no es suficiente para tu enorme polla?

El mencionado estaba por levantarse de su posición e ir a partirle la cara a aquel mal nacido al cual tanto odio le tenia, pero su acción fue interrumpida por la mano de Vegetta el cual tomo su brazo y con un leve gesto de negación le dijo que mantuviera la calma.

—mantente firme Auron —le dijo Vegetta— recuerda que no son ellos...

"Estos demonios...no son ellos..."

THE RED EYES OF THE INCUBUS [RUBEGETTA/LUZUPLAY]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora