Teen Wolf: ONE SHOTS II

21. Stargent

Hace unos meses Chris había ido junto a unos amigos a un club de baile erótico para una despedida de soltero.

Christopher vio a un joven bailando en una de las tarimas y se sintió atraído hacia él. En medio de su rutina el bailarín levantó su brazo derecho dejando ver una marca de alma en forma de Luna flechada.

Cuando el baile terminó, el mayor intentó hablar con él pero no lo dejaron. Decidió, entonces esperarlo afuera hasta que saliera.

— Hola, disculpa. Estaba esperando a que salieras.

— ¿Te conozco?

— No, bueno… Quería mostrarte mi marca de alma.— Chris levantó su brazo mostrándole la cara interna de su brazo derecho donde descansaba la luna atravesada son una flecha.

— Stiles, mucho gusto...

— Christopher. El gusto es mío.

Luego de eso charlaron durante toda la madrugada disfrutando de la compañía.

Hablaron de su trabajo y de las razones por las que Stiles había terminado en ese club.

El padre de Stiles le debía mucho dinero al dueño del club y cuando murió vino a cobrar la deuda con Stiles 

Como el tampoco tenía el dinero suficiente, llegaron a un acuerdo. Stiles bailarina en su club hasta pagar la deuda.

Meses después de ese primer encuentro, Stiles estaba cerca de saldar su deuda.

Estaba muy emocionado ya que Christopher y él tenían planes para cuando pudieran estar juntos lejos del club.

El jefe lo había llamado después de su rutina en la tarima ya que un cliente había pagado por un baile privado.

A Stiles no le gustaba eso ya que sabía que algunos compañeros habían tenido problemas con los clientes porque habían intentado propagarse. Por eso nunca aceptaba hacerlos.

Esta vez era distinto, el dueño del local se lo había pedido como un favor especial. Si intentaba propagarse, solo tenía que gritar y uno de los chicos de seguridad lo ayudaría.

— Christopher ¿Qué estás haciendo acá? — preguntó Stiles sorprendido. 

Se acercó a él y lo abrazó sentándose a su lado.

— Lo siento, quería verte.

— Creí que me esperarías en mi casa.

—Tengo una buena noticia para vos.

— No quiero que te metas en líos Chris. Tienes un trabajo y una hija. No quiero perjudicarte.

— No sabes qué es y ya te estás atajando. — Christopher sonrió agarrando sus manos para mantenerlas entre las suyas. Podía ver sus ojos llenos de preocupación. 

— Chris, te conozco. Decime qué hiciste. 

— ¿Sabes cuánto cuestan estos bailes privados?

— No, es la primera vez que acepto que me contraten para uno.

— Era lo que faltaba para pagar la deuda.

— ¡Chris! ¿Enserio? — respondió Stiles soltándose para saltar encima de su regazo y abrazarlo. Estaba tan feliz. 

Soltó el agarre de su cuello y se alejó sólo un poco para poder mirarlo a los ojos, manteniendo las manos sobre sus hombros.

— Si. Le comenté a tu jefe que era tu alma gemela y me dijo que si pagaba por un baile privado tu deuda quedaría saldada.

— No deberías haberlo hecho.

— Lo siento, se que querías pagarlo todo vos pero no podía quedarme de brazos cruzados.

— ¿Me dejaras pagartelo?

— No es necesario. De ahora en más todo lo mío es tuyo y lo tuyo mío.

— Lo se pero es importante para mí.

— Está bien, si es lo que vos queres.

— Cuando consiga un trabajo te pagaré.

— Muy bien. Ahora me gustaría que habláramos de donde vamos a vivir. Si vos queres, podemos instalarnos en mi casa.

— ¿A tu hija no le molestara?

— Le dije que había encontrado a mi alma gemela.

— ¿Le dijiste a que me dedico?

— Se lo podemos contar si vos queres.

— ¿Y si alguien se entera o me reconoce? ¿Qué va a pensar la gente de vos?

— Sti no te preocupes por eso. Podemos arreglarlo.

— ¿Crees que le caiga bien a tu hija? — preguntó Stiles. 

Que la gente se enterara de lo que trabajaba le preocupaba pero que la hija de su alma gemela lo rechazara le generaba un dolor aún peor.

— Estoy seguro que se llevarán muy bien.— Chris que podía sentir el recorrido de sus pensamientos lo abrazó intentando reconfortarlo. Ahora que podían estar juntos, ayudaría a Stiles a tener un nuevo comienzo.

Hola
No se olviden de pasar por la nota final...
XOXO