Game over (Michaeng G!P)

Parte 2

Los minutos pasaron, mina y chaeyoung salieron a comer junto con los padres de la japonesas, ambos mas encantados por su nueva pareja que por su propia hija. Seguían asombrados, despues de todo encontrar a alguien que aguantara a mina tanto como ellos era casi improbable, momo era la excepción debido a que eran amigas desde pequeñas

Toda la atención se fue llevada a la coreana, que parecía muy contenta con el afecto que estaba recibiendo por los padres de mina, la habían sentado en medio de ambos, dejando a mina de por fuera. Si fuera por ellos, adoptarían a chaeyoung a la familia, y solo bastó un día para que la conocieran

-¿Te gustó el Kimchi, cariño?-

-Sabe como el de un restaurante en corea, creo que han practicado mucho...-

-No hablaba contigo mina, le estaba preguntando a ella- Señalando a chaeyoung, solo bufó, haciendo que los tres se rieran- ¿Nos la podemos llevar a Japón?-

-No es buena idea, ella tiene familia y no ha ido a verla, creo que sería buena idea que se fuera ahora misma a verlos...-

Chaeyoung ya estaba acostumbrada a que mina hiciera comentarios algo fuertes o con un humor realmente pasado de la raya. Solo le basta con reír e ignorarla, al igual que hacían sus compañeros de juego

-Una cara bonita es suficiente para que me dejen de lado-

-Unnie también es linda- Confesó ella, haciendo que mina se volviera un tomate por la vergüenza, ambos padres concordaron

-Por cierto, vimos los juegos...-

-Ustedes son demasiado viejos para entender lo que está sucediendo en el juego-

-Si, tienes razón, no entendíamos nada, pero nos emocionábamos cuando escuchábamos que decían que ganaban. Aunque no sepamos al respecto no significa que no nos sintamos orgullosos de ti- Contestó la madre, con un tono dulce, de verdad no había nada mas que pudiera hacer las cosas mas incomodas

O eso creía, hasta que momo abrió la puerta de la casa con una copia de la llave. Desde que mina había empeorado su condición todos sus cercanos tenían una para irla a cuidar, traía una bolsa con comida chatarra, que soltó de la sorpresa al observar a los padres de mina en el comedor

-¡No puede ser!-

-¡Mogurí!- Ellos también eran capaces de adoptar a momo, en realidad, casi todos los amigos de mina terminaban siendo tratados como hijos de los Myoui, en especial momo, conociéndola desde hace tiempo

Estaba tan contenta de verlos que incluso se emocionó y soltó un par de lagrimas mientras que reía de la felicidad, desde que sus padres murieron eran las personas que podía identificar como superiores

Y ahora estaba sentada al lado de mina, chaeyoung seguía conversando con los padres de mina, que le contaban cosas vergonzosas de su pareja, mientras que momo observaba a su entrenadora

-Debes de admitirlo, tus padres son los mejores-

-¿Y cuando dije que no?- Admitiendo, solo terminó su plato, dando un suspiro- Oigan, ustedes dos, ¿Qué le están diciendo a chaeyoung?-

-De la vez que te llevamos a un restaurante italiano y quedaste con la carita llena de tomate, tenías cinco años- Respondió la señora, mina ocultó su rostro en el hombro de momo, que se estaba riendo de manera histérica

Era muy reconfortante aun si le parecía vergonzosas todas las cosas que le decían a chaeyoung, mina se sentía feliz de poder verlos, y sus ganas de empezar lo que tenía en mente aumentaban

Llegó la hora de dormir, sería difícil descansar sabiendo que la casa de mina era hecha solo para máximo dos personas, pero se las arreglaron, sus padres durmieron en su habitación, y las tres chicas se encontraban en la sala, listas para dormir en los muebles