cuatro.

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Tres días después.

Estaba tan exhausto porque el nuevo perro faldero que tenía no se cansaba de mí, por más mal que lo tratara de verdad que no se cansaba. Quería pegarle un tiro en toda su sien y verlo morir para tener la tranquilidad de estar cualquier lugar sin tenerlo detrás de mí haciéndome pasar vergüenzas innecesarias.

Ayer había estrujado a YoonGi en plena calle ya que me estaba colmando la paciencia y recibí miradas tan extrañas por parte de las personas... Me avergoncé demasiado al ver como todos me miraban con pena y otros con confusión, claramente cuando volví a mirar a Yoongi, éste ya no estaba y me había dejado con todo mi rostro carmesí. Aún se me hacía tan extraño su comportamiento y cuando intentaba indagar sobre su vida siempre terminábamos enfadados. Bueno, en realidad era yo el que se enojaba por culpa de las tonterías que me hacía ese tarado.

Estaba en la habitación de huéspedes haciendo unos trabajos de la Universidad, Yoongi aún estaba durmiendo en mi habitación. Se negaba a dejar mi cama y yo claramente no dormiría con un hombre que cada vez que podía se me insinuaba para cualquier cosa obscena o simplemente con halagos bobos. De verdad que no me gustaba, me aterraba, estaba entrando en la demencia por culpa suya. Sabía que no me gustaba, ni siquiera lo veía atractivo, pero últimamente soñaba con el suceso que ocurrió en el baño de la universidad. Sus labios sobre los míos moviéndose y ¡Despertaba con una tonta erección!, de verdad que quería romper su carita de muñequita, de pronto eso cambiaría algo.

Me levanté de la cama y salí de la habitación, me dirigí a la habitación que realmente me pertenecía para ir por unos cuadernos donde tenía unos apuntes, abrí con lentitud la puerta, me asomé y no había nadie adentro. Sonreí victorioso y me adentré, cerré la puerta con seguro y suspiré, si no le abría la puerta a Yoongi la habitación volvía a pertenecerme. Salté en puntitas y sonreí diciendo repetidas veces "Sí".

— Ahora sí dejaré el bruto fuera — Susurré y escuché como se caían los libros de la repisa de mi habitación, me sobresalté y giré viendo como Yoongi estaba ahí quieto con la misma cara de tonto.

— Uh, te juro que esta vez no fui yo... — Dijo y rascó su cabeza.

— ¿Qué estábamos celebrando?, Amé ver esa sonrisa tan sincera en tu rostro — lo escuché decir sonriendo y fruncí mi ceño.

— ¡No!, tú debías estar afuera y yo aquí adentro solito. ¿Por qué eres así? — Pregunté cansado y lo vi encogerse de hombros, suspiré y tomé su mano, me dirigí a la salida de la habitación. Abrí la puerta y saqué a Yoongi. Él se quedó de pie en el pasillo mirándome.

— ¿Y qué se supone que debo hacer según tú? — escuché su pregunta y lo vi cruzarse de brazos con seriedad. Sonreí ampliamente y reí.

— ¡Ahora tú estás afuera y yo adentro! — Grité efusivamente y lo ví fruncir su ceño con confusión.

— Lo sé, ¿y qué tiene que yo esté aquí y tú allí?

Estiré mi mano hasta su pecho y lo toqué — ¡Tú dormirás fuera y yo adentro! Es decir que me gané la habitación ¡¡Juju!! — De nuevo comencé a dar saltitos.

— me gané la habitación, me gané la habitación y Yoongi la perdió. Volvió a ser de Park Jimin. — Giré varias veces mientras reía y cantaba. No me percaté de que alguien más había llegado y me estaba mirando con una mueca.

— ¿Qué?, ¿Con quién hablas? — Preguntó Jihyun y dejé de girar, guardé mi sonrisa y señalé a su lado, pero Yoongi no estaba. Bajé mi mano y suspiré.

— Jimin, ¿estás bien? — lo escuché preguntar.

Acaricié mi frente con mis dedos y asentí.

— Lo lamento, es que siempre me pasa lo mismo. Cuando le estoy hablando siempre se va y me deja hablando solo entonces luego llegan las miradas raras por parte de los demás porque creen que hablo solo, pero en realidad no hablo solo. ¿Entiendes? — Dije mirándolo y él asintió levemente con la cabeza.

— No, no entiendo porque tengo rato de pie en pasillo y vi como apuntaste a la nada para luego comenzar a gritar. Además ¿a quién le estabas hablando?, que yo sepa estamos solos, ¿o trajiste un amigo? — Preguntó y fruncí mi ceño.

¿Acaso Jihyun no había visto a Yoongi estos días?, ¿cómo era posible?, Yoongi no era cuidadoso, en absoluto. Tal vez Jihyun era un despistado.

— Yo... Pues, es complicado Jihyun. Vas a mirarme como si yo fuese un loco, entonces mejor dejemos esta conversación así. Tú no viste nada y yo no hice nada, así me ahorro las explicaciones y tú no pierdes tiempo hablando conmigo. — Esbocé una sonrisa y vi como negó levemente con la cabeza.

— Está bien, pero deja ese comportamiento tan extraño... Enserio que me hace pensar que tengo un hermano loco que me esconde algo y habla solo. — Dijo y luego vi como se fue. Cerré la puerta de la habitación y me dirigí a la cama, me senté allí. ¿Qué estaba sucediendo?, Ahora sí estaba pensando en que tal vez tenía una maldición y por eso Yoongi siendo tan extraño había llegado a mí así de repente.

Ahora lo único que tenía claro era que dejaría a Yoongi afuera toda la noche y mañana intentaría hablar seriamente con él para tener mi habitación devuelta. También pensaba ponerle un alto a todo esto, no quería parecer un loco, de verdad que no y me sentía como uno.










°•••°








¡Hola!

Capítulo escrito en un momento donde el sueño me estaba invadiendo. No tengo dudas de que el capítulo haya quedado feo o mal escrito. Por el momento quedará así y luego decida revisarlo para corregirlo o añadirle algo más, sé que quedó muy corto y espero hacer el otro un poco más largo.


¡Nos leemos!

Voten y comenten. ( ˘ ³˘)❤

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⏰ Last updated: Nov 10, 2020 ⏰

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The dismal world of Jimin~ °•Yoonmin - Jimsu•°Where stories live. Discover now