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Emily, que temblaba tanto, parecía que iba a colapsar en cualquier momento.

Sin embargo, comenzó a pasar sus manos por su cabello que estaba atado.

Pronto, se vio una aguja gigante en su mano que salió de su cabello.

'Oh, muy bien escondida, ¿no es así?'

Por supuesto que Penélope siempre fue la víctima. Eran así de intensos.

Hubiera querido gritarle a la criada que siempre la maltrataba, pero no podía porque no tenía pruebas.

"A-Aquí está..."

Emily me dio la aguja con sus manos temblorosas.

Miré fijamente el objeto que había herido continuamente a Penélope hasta ahora. Era una simple pieza de metal que ni siquiera era tan grande.

Sin embargo, ayer me di cuenta de lo dolorosa que esta aguja fina y pequeña podía ser para una persona.

Cuán doloroso hubiera sido para ella.

Nadie se habría dado cuenta aunque sus brazos se debilitaran con marcas de cicatrices sangrientas debido al dolor que sentiría cada mañana al despertar.

"Levanta la cabeza".

Apreté los dientes y ordené.

Emily levantó la cabeza con vacilación.

La desesperación se podía ver en sus ojos vacilantes ya que probablemente estaba pensando en cosas que experimentaría ahora por la violenta lady.

"Mira esto de cerca, Emily".

Alcé mi mano sin la aguja delante de Emily.

Era una mano blanca y lechosa de aspecto frágil sin cicatriz. Estaba volteada, así que el dorso de la mano estaba de cara al techo.

Luego planté la aguja en ella con la aguja que Emily me dio sin dudarlo.

"¡Ack! ¡Señora!"

Fui yo quien fue pinchada con la aguja, pero fue Emily quien gritó como si fuera ella la que fue pinchada en mi lugar.

Entonces saqué la aguja que estaba plantada a mitad de camino en mi mano.

"Ugh".

Gotas de sangre empezaron a salir de la perforación.

Me preparé para esto pero me dolió mucho. Fue hasta el punto de que se me llenaron los ojos de lágrimas.

Pero no lo mostré en la cara mientras me clavaba la aguja en la mano, cerca de donde me pinché hace un momento.

"¡Ah!"

Esta vez, no pude soportar el dolor al emitir un sonido.

"¡S-Señora!"

Emily respiró fuerte como si estuviera teniendo un ataque de pánico.

Emily, sin saber qué hacer, soltó lágrimas por mis acciones imprudentes. Fue una escena bastante divertida de ver.

'¿Por qué está tan asustada cuando hizo cosas mucho peores que esto antes?'

"¡Señora, hic! ¡Señora, por qué está haciendo esto!"

"No hay necesidad de llorar así, Emily. Ya que estas son las cicatrices que me hiciste."

Le respondí en un tono suave. Entonces la expresión de su cara se quedó en blanco.

"...¿Eh?"

"Puede que sean dos en este momento, pero siempre podría ser tres, cuatro y cinco. Tal vez incluso más."

L. M. E. E. U. F. P. L. VWhere stories live. Discover now