EXTRA: JIMSU

29.3K 4K 1.7K
                                    

Seis años después.

YoonGi metió toda la mandarina pelada en su boca para después limpiar sus manos y las comisuras de sus labios, intentando no dejar algún tipo de evidencia de lo que estaba haciendo. Si su cuñado, JungKook, lo encontraba comiéndose la mandarina que robó de su mochila, no viviría para contarlo. Pero no podían juzgarlo, Jimin y él no habían hecho las compras el día anterior, por lo que la falta de frutas lo tenía loco.

—¿Te estás comiendo las mandarinas de mi marido?

YoonGi dio un salto asustado al escuchar la voz de su mejor amigo. Lo volteó a ver, y le sonrió con las mejillas hinchadas gracias al fruto en su boca, negó con la cabeza y trató de sonreír.

TaeHyung rió divertido, adentrándose en la cocina.

—Si JungKook se entera que te comiste una de sus preciadas mandarinas, considérate omega bajo dos metros de tierra.

—No ayudas en nada, Tae —frunció en ceño, tratando de tragar toda la fruta de un solo—. Se supone que tienes que cubrirme para que tu macho no me haga nada.

—Lo haré, pero me vas a deber una, eh. Sabes que JungKook se va a pasar quejando por un día completo, y seré yo quien tenga que aguantarlo —rió, pensando en lo mimado y dramático que era su alfa.

—Lo que digas —YoonGi asintió. Pensó que TaeHyung se iría y lo dejaría solo, pero la mirada penetrante que le dedicó, puso todas sus alertas en rojo, pensando en que se vendría algún tipo de regaño o charla—. ¿Ahora que hice, TaeTae? —suspiró, sentándose y recostando sus brazos en la mesa de comer.

—Tengo que hablar algo muy importante contigo... JungKook está hablando con Jimin.

—¿Y los gemelos? —preguntó alterado.

—YoonGi, cálmate, están viendo televisión en su dormitorio junto con Beommy.

El omega de cabello castaño suspiró notablemente aliviado, restregando sus cansados ojos.

—Yoon... ¿Desde hace cuánto tiempo que no duermes como deberías? —TaeHyung se sentó frente a él, tomando las manos de su amigo.

—No sé, supongo que desde que Yumeon se cayó desde las escaleras por culpa mía —los ojos de YoonGi se pusieron llorosos, aún no se perdonaba que por su negligencia, algo malo le pudo pasar a uno de sus cachorritos.

TaeHyung suspiró.

—Eso fue hace un año, Yoonie, y no fue tu culpa. Estabas lavando la ropa mientras tenías la comida en la estufa y tratabas de cuidar a dos cachorros revoltosos que no te hicieron caso y salieron de su habitación.

—Justo por eso, soy un mal padre, se suponía que debía estar con ellos. Jimin estaba trabajando y yo no pude hacer algo bien -sollozó.

TaeHyung respiró hondo sin saber que más decir. YoonGi era un terco de nacimiento, por lo que se seguiría echando la culpa por el resto de su vida.

—¿Cuando fue la última vez que tuviste intimidad con Minnie hyung?

El castaño alzó la vista sorprendido ante el cambio de tema.

—Hace... no sé, ocho meses, ¿tal vez?

El castaño abrió los ojos, sabía que las cosas con su mejor amigo y cuñado no iban tan bien como hacía años, pero tampoco creía que para tanto.

—Ustedes eran unos conejos, prueba de ello, esos dos cachorros hiperactivos, ¿por qué tanto tiempo sin contacto? ¿Ni siquiera han pasado sus celos juntos?

YoonGi negó.

—Desde lo que pasó con Yumeon, ninguno de los dos nos separamos de nuestros cachorros, por miedo a que pueda pasarles algo peor, así que también dormimos con ellos.

un omega de mentira | kooktaeWhere stories live. Discover now