Avanafil (Stendra)

1.6K 199 34
                                    

"No haremos el amor, el amor nos hará."

-Julio Cortázar

Era ya más tarde, el día se les había ido en ver películas, preparar pasteles, conversar, reír, disfrutar la compañía del otro.

Estados Unidos acababa de tomar un baño cuando notó que su novio no estaba ¿a dónde se iba siempre? Terminaba de ponerse los pantalones hasta que sintió que alguien le abrazaba por los hombros. El pecho desnudo del otro se pegaba con la espalda descubierta del americano.

—Corazón— dijo con susurro suave que logró erizarle la piel— ¿podemos hacerlo?— preguntó dando pequeños besos en el hombro y cuello del contrario, intentando que sus sentidos despertaran.

Las pequeñas y suaves manos del latino se fueron desplazando por su pecho, acariciando el torso, hombros y fuertes brazos del de estrellas. Los besos suaves fueron tomando más emoción, succionando la piel del americano y mordiéndolo un poco.

—¿Qué dices?— volvió a susurrar.

USA le besó, al principio tímido, sin embargo, el latino le obligaba a sumergirse en un ambiente lleno de lujuria. Sin pena alguna se sentó en las piernas de la potencia, tomando sus manos para pasarlas por su delgado cuerpo.

México tenía una figura envidiable, que cualquier mujer quisiera tener, a pesar de ser bastante delgado tenía muslos gruesos y caderas anchas, que contrastaban perfectamente con su pequeña cintura. Sin duda todo un deleite para el americano, quien comenzaba a despojarse de su timidez para apretar un poco los costados del chico, sintiendo su cintura, la curva que formaban sus caderas y el redondo y suave trasero del mexicano.

Se mantenían unidos en un beso sin vergüenza y profundo. Los labios del menor eran suaves y se movían con rapidez, se podía sentir la necesidad del chico. Soltó un pequeño quejido cuando estados unidos le mordió.

México se bajó para quedar de rodillas frente al americano, recargó un poco su mejilla sobre la pierna del más alto mientras que este acariciaba un poco su cabello haciéndolo sonreír. No le tomó mucho desabrochar su pantalón, el chico que estaba de rodillas acercó un poco su mano al miembro dentro del bóxer de su pareja y acarició por encima de la tela. Pasaba sus pequeños dedos por el bulto que comenzaba a crecer con cada toque, casi como si hiciese un masaje. Acercó su rostro un poco más a la entrepierna de su pareja para depositar un beso en esta, logrando que el americano soltara un pequeño gruñido.

Con más confianza ahora, tomó el elástico de la ropa interior de su novio para bajarla lo suficiente para poder liberar el pene semi erecto del de estrellas. Con sus dedos índice y pulgar comenzó a rodear la circunferencia de este, sujetando suavemente la punta volvió a dejar otro beso, esta vez más húmedo que los anteriores. Pasó su rosada lengua con delicadeza sobre el glande mientras le sostenía la mirada.

You are going to make me crazy (Vas a volverme loco)

El mexicano utilizó un poco su cálido aliento para tentar al americano, disfrutando de las reacciones del contrario antes comenzar a meter la punta en su boca. Estados Unidos se hundió en placer al sentir la cálida y suave boca del latino succionar su pene. Era una sensación placentera y abrumadora, su miembro estaba despierto ya. Intentaba dejar al mexicano marcar su ritmo, pero si seguía de esa forma, definitivamente iba a perder el control.

México por su parte comenzó a mover su cabeza metiendo y sacando el pene de Estados Unidos de su boca, su lengua jugaba un poco con el falo del mayor, a veces la pasaba por toda su extensión sintiendo las venas que resaltaban antes de volver a meterla casi por completo, jugaba un poco con sus testículos, chupándolos y acariciándolos con la lengua de una forma casi tortuosa. América no tenía idea de cómo era tan bueno, pero vaya que lo estaba disfrutando.

ABSTINENCIA (USAMEX)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora