❝As I'm laying on your chest
I'll be out here thinkin' 'bout it, boys just to guess
Some of them keep telling me I'm better than the rest
And I ain't tryna rush you, but goddamn, I'm a mess, mess, mess❞
«UN HOGAR NO ES UN EDIFICIO, NI UNA CALLE, NI...
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Ekaterina mira a su hermano escribir en la pared con una tiza, minutos después ya tenía casi toda la habitación llena de cálculos matemáticos. Cero rueda los ojos mientras se pone a analizar el otro lado de la habitación. Ve los cuadros, libros, objetos y el maniquí del demonio.
— ¿Cuándo vas a dejar el bendito maniquí? —pregunta la latina mientras alza a Dolores—. No me has contado porque lo tienes.
—No es un simple maniquí, se llama Dolores, es mi amiga desde que viajé al futuro —responde Cinco—. Es muy importante para mí. Es la única amiga que tenía ya que tú no estabas ahí.
Y luego el muchacho decide seguir con sus cálculos. Ekaterina sonríe con tristeza mientras mira el maniquí. Deja a Dolores donde estaba y decide sentarse en un sillón que había en la habitación esperando que su hermano acabe.
— ¿Y qué...? —la mujer se ve interrumpida por Luther quien asoma su cabeza por la puerta. El hombre pasa al cuarto mientras Ekaterina le ve interrogante.
—Es un mapa de posibilidad de personas que podrían ser las causantes del Apocalipsis, las reduje a cuatro —responde el chico quitando su mirada de Kate llevándola al rubio—, cada evento sucede por algo, y lo más mínimo podría tener grandes efectos en la continuidad temporal, como el efecto mariposa. Lo único que debo hacer es encontrar a quien tiene mayor posibilidad de continuidad temporal y matarla.
— ¿Dices que algunas de esas personas podría ser quien ocasiona el Apocalipsis?
—Exacto —afirma Cinco mientras busca algo debajo de la cama.
—Creo que es un jardinero —responde Cinco sacando un estuche de un arma.
— ¿De dónde sacaste esa arma? —pregunta Ekaterina con el ceño fruncido mientras inspecciona al de ojos azules.
—De la habitación de papá —dice mientras saca el arma—. Creo que la usó para dispararle a un rinoceronte, es similar al modelo que usé en el trabajo, ajustado a los hombros y altamente confiable.
—Pero no puedes... —niega el rubio—. Ese tipo, Milton es un hombre inocente.
—Es matemática básica, si él muere podría salvar vida de millones, si no hiciera nada estaría muerto en cuatro días de todas formas —dice Cinco con obviedad con su mirada clavada en Uno—. El Apocalipsis no perdona a nadie.
—Nosotros no hacemos esto, Cinco —dice Ekaterina enojada.
—Ustedes no harán nada, yo lo haré.
—No dejaré que mates inocentes, no importa a cuantas vidas salves.
—Buena suerte deteniéndome —se mofa el de aspecto de adolescente.
