Ser más fuerte - T1

El encuentro frustrado

La muchacha se quedó estupefacta. No podía dar crédito a lo que el chico decía.

-"Esta bien... Te dare la oportunidad que pides."- dijo Sasuke en tono seco y frustrado.

Karin al escuchar tan increíbles palabras lo soltó para juntar sus manos hacia ella.

-"¿De... de verdad... Sasuke-kun..?"- preguntó la peliroja aún sin poder creerlo.

Sasuke se volteó a verla a los ojos mientras levantó su mano para agarrarla de la barbilla.

-"Si te la doy. ¿Qué harás?"- preguntó el chico con el mismo tono de voz imparcial de siempre.

Sin embargo, él comenzó a acercarla lentamente a él.

-"S...Sasuke... No te arrepentirás..."- murmuró la chica mientras se quedaba hipnotizada en aquellos ojos negros.

Karin comenzó a cerrar los ojos para lo que sería el inminente beso que se avecinaba.

-"No, Karin. Abré tus ojos."

Las palabras de Sasuke fueron un mandato para ella. Karin abrió sus ojos luego de una pestañada y pudo ver por primera vez algo que la dejó helada.

Aquellos ojos negros eran ahora unos ojos rojos con 3 tomoes en ellos.

-"Sasuke..."- dijo ella totalmente impactada.

El miedo recorría cada centímetro de ella.

-"No vuelvas a tocarme nunca más."- dijo Sasuke con una voz seria pero amenazante.

Por medio de su Sharingan metió a la muchacha en un genjutsu que la hizo caer el suelo casi inmediatamente.

Karin, aún tendida en el suelo se estaba reponiendo de aquel genjutsu espantoso que parecía haber durado al menos una semana, pero cuya duración real fue de casi un minuto.

-"Tu.. te atreviste... a meterme en un genjutsu..."- dijo ella tratando de sentarse. Su respiración era agitada.

Pero Sasuke ya no escuchaba, solo tenía la vista clavada frente a él. Su sharingan se había disipado. A unos metros habían unos matorrales que no parecían distintos a los demás, pero que Karin sabía que habían albergado a una muchacha que los estaba espiando.

Karin sonrió.

Sasuke se acercó a los matorrales y los inspeccionó hasta encontrar algo totalmente extraño al lugar en donde estaban.

Levantó del suelo un pedazo de tela roja y miró de nuevo en dirección a donde se encontraban las pisadas.

Quien sea que haya estado allí momentos antes, ya se había ido.

Los ojos de Sasuke se tornaron de tristeza por unos segundos, lo cual no pasó desapercibido para Karin.

-"Será mejor que descansemos. Mañana continuaremos con la búsqueda."- dijo el chico totalmente serio sin siquiera verla.

Comenzó a caminar en dirección contraria a las pisadas. Era poco probable que ella etuviera allí. Además, si así fuese, esta vez no estaba dispuesto a seguirla.

Se alejó de Karin lo más que pudo. Apretó con fuerza el pedazo de tela que había recogido y miró hacia el paisaje.

No sabía si quería comprobar si fue ella o no, pero algo muy dentro de si mismo le decía que si lo era.

En sus ojos se notaba la tristeza que su alma reflejaba, pero eso no le permitió decaer.

Dejó volar el pequeño trozonde tela. Él solo podía pensar en la venganza.