Capítulo 39

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"Sin un pensamiento. Sin una voz. Sin alma. No me dejes morir aquí. Debe que haber algo mal. Tráeme a la vida"

William despertó de muy buen humor esta mañana, así que decidimos venir al centro comercial por un rico desayuno. Nos sentamos en Starbucks cuando nos dan nuestra orden. Unas chicas bien arregladas y demasiado maquilladas para la mañana lo miran con la boca abierta. Me gustaría ir a cerrárselas, porque esta mole de músculos, tatuajes, ojos verdes y cabello castaño, es mía. Solo mía. Pero de todos modos estoy acostumbrada a que las chicas se le queden mirando, es el efecto que causa mi chico malo en ellas.

- Así que ¿Qué vas a decirles? - Le doy un mordisco a mi dona rosada y Will sonríe.

- No lo sé, supongo que algo como... "Hola, aquí está el dinero que pagaron por mi fianza hace años, gracias por eso" - Él se encoje de hombros y asiento. Es muy William.

- Me parece bien.

- Y voy a hacerle a Gemma la transferencia, supongo que lo que le de va a servirle para su último año en Londres. - Él echa un vistazo por la ventana.

- ¿Ella va a volver de allí? - Saboreo mi capuccino con doble ración de chocolate.

- No lo creo. - Will hace una mueca. Puedo notar que la extraña - Cambiando de tema, quiero ir a la tienda de tatuajes. - Me dice y lo miro rápido. Abro un poco los ojos - Hace meses que no hago nada nuevo. - Se defiende. Supongo que no estoy mirandolo muy bien, es decir, me gustan sus tatuajes, pero ¿Más?

- ¿Qué vas a hacerte? - Lo miro seriamente.

- Ohm... No lo sé aún, no lo he decidido. - Will pasa una mano por su cabello y suspira - Tal vez una inscripción. - Sus ojos verdes brillan con el sol de la mañana ¿Cómo puede ser tan guapo?

- Bien, te acompaño. - Le sonrío y él asiente.

****

Estamos a varias cuadras del centro comercial, casi fuera del radio y me llama la atención que todo a nuestro al rededor esté tan sucio. Will conduce un poco más, nunca he venido a esta parte de la ciudad y nunca lo haría sola y sin él.

Estacionamos frente a un pequeño local pintado de negro en donde se lee "Insane: tienda de tatuajes". Trago un poco la bilis en mi garganta al ver salir a dos tipos altos, anchos y con demasiado bello facial. Ambos llevan camisetas de Metalica y cuando Will y yo cruzamos la calle tomados de la mano, nos miran.

- ¡Mira quién está aquí, el pequeño hijo de puta! - Uno de los hombres le dice al otro y me desespero abriendo los ojos, pero cuando miro a Will, él está riendo sacudiendo su cabeza hacia los lados.

- Voy a romperte la cara, Matt. - William le advierte señalandolo con el dedo.

- Quiero verte intentándolo, Crawford. - Matt enciende un cigarrillo - Señorita. - Me saluda amablemente y le sonrío.

- Hasta que decidiste optar por una verdadera chica, William. - Una mujer de unos treinta y tantos sale de la puerta de la tienda. Está repleta de tatuajes y su cabello es de un denso color negro, haciendo contraste con su blanca piel.

- Hey, Gin. - William la besa en la mejilla - Ella es Grace. Grace, ella es Gin. - Él nos presenta y la chica me saluda con un beso en la mejilla, también.

- ¿Qué vas a hacerte, grandulón? - Seguimos a Gin hacia dentro de la tienda. Las paredes están cubiertas de graffitis y todo es oscuro. Así que ella es la escultora de todos sus tatuajes.

- Una inscripción, aquí. - Will señala su pecho, en la parte izquierda y Gin asiente.

- Bien, acuéstate. - Ella señala la camilla negra y Will se saca la remera blanca y se recuesta, yo lo sigo. Nunca he visto cómo se hacen tatuajes y no se si quiero verlo.

Inducción |h.sWhere stories live. Discover now