FREEDOM, eren j. [snk]

𖠱ּׂ̼݉͗፞🍎ᬼᬼ 𝗣𝗔𝗥𝗧𝗘 𝗡𝗨𝗘𝗩𝗘.

❝ꓸ᭄ꦿ⃔𝐅𝐑𝐄𝐄𝐃𝐎𝐌 ─── Eren Jaeger.
ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ ɴᴜᴇᴠᴇ: ᴀᴠᴇ ᴘᴇǫᴜᴇɴ̃ᴏ.

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————— Artemisia. ——

Había pasado un tiempo, después de lo de aquella noche pudimos ver a la legión de reconocimiento llegar. Me sorprendió ver a varios de los soldados que son fuertes dentro de ella. Próximamente ya teníamos que irnos preparando de manera más formal para la elección de dónde queremos ser reclutados.

Actualmente me encontraba en el cuartel para recibir la orden de en qué parte seré de ayuda. Apenas cuando me iban a anunciar las indicaciones para dirigirme a las murallas, llegó un recluta más y dió la noticia de que el titán colosal había regresado para destruir la muralla.

Rápidamente nos mandaron a prepararnos para combatir contra titanes.

Titanes... En realidad nunca había visto a uno, y por más que tenga la capacidad para exterminarlos me ganan los nervios.

— No vamos a morir. — Orlando me tomó de los hombros y se puso a mi altura — Recuerda que somos fuertes.

Entre abrí mis labios sin saber que decir. Ahora era él quien se encargaba de recordarme cómo fue que llegamos hasta aquí, y tiene razón.

— No te separes de mí.

Él asintió y yo sonreí ligeramente.

Nos dirigimos hasta los tanques y llenamos los nuestros para desplazarnos con el equipo de maniobras tridimensionales, mientras, vimos de reojo a varios principiantes como nosotros perder la cordura rápidamente, gritaban y se ponían a dar lloriqueos por la desesperación de no querer morir. Los miré con tristeza y me alejé de ahí junto a Orlando para ya no sentirme peor.

Uno de la policía militar se acercó hasta ambos y tomó la esquina de mi uniforme, lucía cansado de buscarnos.

— A-Artemisia y Orlando Falkenhorst, fueron escogidos para seguirme a mí y otras personas de puestos superiores. — Dio un gran respiro.

Parpadeé varias veces.

— ¿De verdad? — Pregunté con duda — Somos reclu-

— ¡Son órdenes! — Gritó de la nada — Solo siganme.

Intercambié miradas con Orlando por lo confuso que era esto. Me dio una palmada en el hombro y avanzamos temerosos.

De reojo pude notar a Eren, él me notó de igual forma y me sonrió con desición, a su lado estaba Mikasa tratando de decirle algo, solo que la misma persona que nos habló se acercó a ellos y le dirigió la palabra a la azabache.