Liz y su familia se encontraban de viaje en Alemania. Este paseo, era en parte una recompensa por haberse graduado con honores de la Escuela de Artes, y esperaba trabajar como restauradora en el Museo Metropolitano de Nueva York. Su estadía había coincidido con el festival de Colonia, por lo que una noche ella y su hermano salieron a mezclarse con los viandantes enmascarados. Esa sería la última noche de Liz Saunders. Después del sangriento ataque en el parque ya no será la misma.