Ambos estaban en esa silenciosa habitación, ninguno de los dos hablaba. Solo el pitido intermitente de la máquina conectada a su cuerpo rompía el horrible silencio que había entre ellos. - Antes de irme, tienes que prometerme una cosa. Prométeme que cuidarás de nuestro hijo... - Claro... Sabes que haré lo que sea por él. Te lo prometo. - Se llevó la mano de ella a la mejilla y asintió mientras lágrimas empezaban a acumularse en sus ojos. Pasados ciertos minutos, la máquina dejó de emitir el intermitente pitido para cambiar a un estridente y molesto pitido largo. El sonido se mezcló con los sollozos del hombre, que abatido, dejó un beso en los labios del que fue su primer amor. ¿Podrá cumplir la promesa que le hizo a su mujer antes de fallecer? La historia es 100% mía. Los personajes no son míos, yo solo dejo volar mi imaginación con ellos. Espero que os guste la historia. Pido perdón si hay algún error ortográfico.