¡Qué día!

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- ¿Pramheda? ¿Qué haces aquí? - Pike se levantó con urgencia de su silla. Roan miraba a Lexa con los ojos llenos de susto y miedo por lo que podría hacer la morena.

- He venido a mandar los archivos para el equipo comercial - explicó fríamente.

La sala se quedó en silencio. Roan estaba claramente incómodo con la situación, pero Pike demostraba una frialdad envidiable.

- Estaba segura de que te olvidarías. Te envié un email con mi parte adjunta, el señor Kane puntual la envió ayer. Sólo falta la tuya. Agradécemelo - dijo Lexa girando los ojos.

- Ahhh Pramheda. ¿Siempre salvándome eh? Voy a mandarlo ahora mismo.

- ¿Y tú, Roan? ¿Sucedió algo? ¿Algo de lo que deba preocuparme?

Roan tragó en seco. Lo que dejó a Lexa aún más intrigada, nunca lo había visto fuera de su postura de seguridad.

- Roan vino a notificarme que estaba redireccionando a los hombres que cuidaban la seguridad del predio este para sus antiguos puestos.

- Ah, claro... Ahora que Finn Collins fue arrestado, no tenemos la necesidad de tener tanta seguridad en aquel predio, no?- dijo Lexa sonriéndole a Pike.

- Por supuesto - dijo Pike, y el silencio se instaló de nuevo.

- Cómo puede ser él, parecía un alumno tan dulce - dijo Lexa actuando.

- Una desgracia - dijo Pike fingiendo indignación.

- Creo que no todos son lo que uno piensa. Triste, pero ahora se podrá andar tranquilamente por la universidad - dijo Lexa con expresión de alivio.

Los dos hombres sonrieron nerviosos. Claramente todos con excepción de Lexa estaban completamente tensos, contando los segundos lentamente para que la morena se marchara.

- Bueno señores, me encantaría quedarme, pero es viernes y me voy a disfrutar de una buena fiesta llamada... Sueño - dijo con humor. - Buen fin de semana. Y Pike...

Lexa dijo antes de salir.

Pike con las manos en la cintura, mostrando impaciencia respondió:

- Sí?

- No te olvides del email.

- No, no, lo haré ahora.

Lexa se volvió y se dirigió hacia la salida.

Una vez Lexa salió, los hombres dejaron salir el aire y se miraron:

- ¿Crees que oyó algo? - preguntó Pike.

- No. Pramheda es demasiado caliente como para no decir nada. Realmente sólo vino a hacerme un favor - le mintió a Roan, aún mirando hacia la puerta.

Lexa aparentaba tener todo el control y una postura segura, pero al llegar a la planta baja del edificio, necesitó recostarse en la pared y calmarse.

- ¡Mierda! ¡Maldita sea! - se dijo a sí misma. Su mano temblaba y necesitó apretarla en forma de puño para intentar controlarse.

Respiró profundamente algunas veces, aguantando las ganas de llorar.

Miró al edificio de Clarke que estaba a unos metros de donde estaba y tuvo unas enormes ganas de ir allí. Pero no se lo permitió.

Siguió hacia su coche con pasos amplios, estaba agitada, nerviosa. Se detuvo en la puerta de su coche y se apoyó en ella, no iba a ser capaz de conducir. Fue en ese momento en el que oyó unas voces:

- ¿Me entiendes?

- No importa lo que digas, sé que todo lo que hice fue por amor, Clarke.

Eran Clarke y Abby, parecían discutir en la entrada del edificio. Lexa corrió detrás del edificio de Clarke, no quería ser vista.

Teach me (Traducción Clexa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora