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—Jungkook— pronunció el rubio después de un tiempo.

El pelinegro se aferraba a él tanto que podía sentir como su corazón latía, Jungkook no quería soltarlo y volver a la realidad, tenía sus ojos cerrados con su nariz en el cuello de Jimin.

Necesitaba esto, tenía miedo de soltar al rubio y que el arrepentimiento de lo pasó hace un par de minutos le afectará, parecía un niño y un poco inmaduro pero sólo quería que Jimin se quedara.

—Jungkook— volvió a llamarle.

—Por favor— susurro— No te alejes.

—Necesito que hablemos.

El pelinegro salió de su escondite y antes de abrir los ojos tomó una bocana de aire, Jimin podía ver el miedo en su mirada, a pesar de que Jungkook era todo un hombre él podía ver los mismo ojos, lo miraba con amor y ese brillo inigualable.

—No me digas que te arrepentiste, por favor— dijo con tristeza.

—Jungkook yo...

—Por favor

Jimin suspiro y se le quedó mirando por un par de segundos, se acercó a él y volvió a tomar sus labios.

—Solo quería algo de comer— mintió— Salí sin desayunar.

Jungkook le regalo una sonrisa, tomó su camisa y con delicadeza se la puso al rubio. Se puso de pie y aún cargando a Jimin se dirigió hasta la cocina, lo dejó en uno de los asientos de la enorme isla que se encontraba ahí.

—Te prepararé algo delicioso— pronunció emocionado para luego dejar un pequeño beso en la nariz del rubio.

—Jungkook— rio y hizo desaparecer sus ojos— Creo que deberías cubrir eso— señaló en miembro flasido de Jungkook.

El pelinegro de repente sintió mucha vergüenza y corrió hasta la sala para colocarse el chandal que anteriormente llevaba puesto. Regresó y tomó la mano de Jimin dejando un pequeño beso en el dorso de esta, se dirigió al lavado y limpio sus manos.

Jimin en respuesta solo sonrió, se dedicaba a mirar como el pelinegro se movía de un lado a otro, el rubio no pronunció ninguna palabra pero la imagen de Jungkook con solo un chandal era majestuoso, simplemente perfecto.

Después de comer se dedicaron a darse mimos el uno al otro en el sofá, Jimin se encontraba entre las piernas del pelinegro, Jungkook se dedicaba a besar y acariciar todo a su paso.

Esto parecía un sueño del cual no quería despertar, pero sabía que en cualquier momento Jimin tendría que irse y regresar con su prometido, odiaba eso pero había dado un gran paso y ahora más que nunca se aferraria a esa gran oportunidad que había surgido.

—Tengo que irme— dijo Jimin.

—Lo sé— se notaba la desilusión en sus ojos.

—Jungkook— le llamó— No me arrepiento de nada.

El pelinegro le creía pero ahora tenía una gran duda ¿Que pasaría ahora? ¿En qué los dejaba a ellos dos? ¿El será el amante?

—Se que tienes muchas dudas, te conozco— Jungkook abrir sus ojos sorprendido y Jimin lo notó.

Te conozco

Jungkook estaba seguro de lo que escucho.

—Lo que quiero decir es que quiero seguir con esto— hablo rápidamente el rubio antes de que las preguntas iniciarán, no quería que Jungkook descubriera que lo recordaba, al menos no por ahora.

—¿Me estas pidiendo que sea tu amante?

—Yo no... Yo no quise decir eso— dijo nervioso— Solo quiero esto, quiero estar contigo.

—¿Y Young?

—No he estado con él por más de un año—el corazón de Jungkook dio un salto, aunque sonara cruel esto lo ponía feliz— Es tonto pedirte esto pero ¿estarías conmigo?

Esto podía ser malo pero era su oportunidad, si Jimin no lo recordaba él haría que se enamorara de nuevo.

—Está bien— esto de acuerdo.

—¿En serio?— preguntó incrédulo, Jungkook asintió.

Jimin se emocionó y lo beso, quizá los dos eran muy tontos. Uno por fingir que no recordaba y el otro por no notar el repentino amor que surgía del rubio.

🍂🍂🍂

Despues de una ronda más de sexo y prometerle a Jungkook que todo estaría bien, Jimin salió del penthouse del pelinegro para dirigirse a una cita con Taehyung y Seokjin.

Necesitaba hablar con alguien y aunque todavía tenía muchas dudas, necesitaba a sus amigos. Ellos eran los únicos que no le mentiría ¿Verdad?

Cuando entró a la cafetería ellos ya se encontraban ahí, los dos parecían hablar alegremente. Se acercó a ellos y les mostró su más sincera sonrisa.

—¿Llevan mucho tiempo esperando?— preguntó una vez estuvo frente a ellos, tomando asiento.

—No te preocupes— mencionó Seokjin— Solo un par de minutos.

—Pues yo soy el primero en venir— hablo Taehyung— Y llevo 15 minutos aquí.

—No exageres— le dio golpe el mayor.

Jimin se echo a reír, la mesera llegó y pidieron sus órdenes, el rubio estaba nervioso pero necesita el apoyo de sus amigos. Después de recibir sus órdenes se dedicaron a comer y hablar cosas triviales.

—Estoy tan lleno que creo que un niño saldría de aquí— señaló su estómago el chico peliazul.

—Creeme, tener un niño dentro no se siente como comida— Habló Seokjin

—¿Cuánto tiempo falta para tenerlo entre nosotros?— preguntó Taehyung, refiriéndose al embarazo del mayor.

—En seis semanas será la cesaría.

—¿Puedo ayudarte cuando nazca?

—Claro que sí, pero no quiero que toques a mi bebé— dijo el mayor.

—¿Por qué? Eso es injusto.

—Tae, no quiero que mi hijo tenga su primera caída a pocos días de nacido.— Jimin rio simplemente observando como sus amigos discutían sobre el tema.

Muchas cosas pasaban por su mente, pero si sus amigos sabían la vedad ¿por qué nunca se la dijeron?

—Chicos— habló llamando la atención— Puedo hacerles una pregunta.

—En realidad ya la estas haciendo, pero entiendo tu punto.

—Tae— regaño el mayor— Haz la pregunta que quieras Jimin.

—¿Ustedes me contestaran con la verdad?

—No tienes ni que dudarlo— dijo el peligris.

—¿Quién es realmente Jungkook?

Silencio, eso fue todo después de la pregunta, sus amigos no sabían que él había recordado pero quería saber la respuesta que ellos le darían.

—¿Jungkook? Que quieres decir, es el, el, el— Bien, tae se había quedo en blanco.

—El socio de tu padre— completo Seokjin.

—Si, el socio de tu padre— concordo el peliazul.

—Y mi ex novio— agregó el rubio.

La cara de sorpresa que sus amigos le dedicaron podía simplemente pasar como una de película. Se veían pálidos y podía jurar que habían dejado de respirar.

—¿Ahora sí me contestarán con la verdad?— preguntó un poco desanimado.

Chicos se miraron entre sí, sin decir ninguna palabra. Jimin estaba a la espera de cualquier cosa, pero ellos simplemente mantenían el silencio.

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Prometo actualizar más seguido

•❅Before Winter❅• Kookmin. Where stories live. Discover now