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Camila miraba espectante a la mujer quien en ese momento le daba la espalda, la joven estaba cruzada de brazos mientras se deleitaba con la vista dónde resaltaba a lo lejos la punta de el Capitolio.

-"Entonces? Que dices?" Preguntó la castaña no aguantando más el silencio, un suspiro salió de la boca de su acompañante, para después darle cara a la ojimarron con una amplia sonrisa adornando su cara.

-"Digo que por supuesto que si" Respondió encaminado sus pasos a los brazos de Camila quien la recibió gustosa, un tanto aliviada por la respuesta, aunque siendo honesta, era la que esperaba. -"Me haces la mujer más feliz del mundo" Mencionó Juliette besando los labios de Camila, quien sonrió ante la reacción de su prometida.

Hace apenas unos momentos había dado la noticia que debían adelantar la boda, quizá como máximo un mes. A la ojiazul ni siquiera le importo el motivo que llevo a Camila a tomar esa decisión. Lo único que le importaba era el fin, casarse con su prometida. Compartir una vida a su lado.

Se sentía radiante, y su felicidad no cabía en su cuerpo que tenía que salir en forma de sonrisas y lágrimas.

-"Hey!! Juls, pero no llores" Pidió Camila limpiando suavemente las lágrimas derramadas en las mejillas de la heredera.

-"Lo siento, es que estoy tan feliz" Explico en medio de una risa que solo hizo sentir mal a la castaña, porque definitivamente ella no se sentía de esa manera. -"Pero ya, hay que planear todo bebé. Tenemos que ir a Chicago a darle la noticia a tus padres, y también debemos organizar una cena para informarle a los míos" Planeo la ojiazul mirando a los ojos de Camila, quien sonrió incomodamente, pero Juliette estaba tan feliz que apenas lo noto.

-"Si claro, lo que tú digas nena" Estuvo de acuerdo Camila con una sonrisa. Juliette sonrió complacida y volvió a besar a la castaña más profundamente.

-"También es importante planear dónde será amor, aunque es muy pronto, no hay nada que con un poco de dinero podamos resolver" Reflexionaba la más joven, Camila asíntio pero sin duda no le interesaba mucho todo eso en ese momento, y probablemente nunca. -"En fin, le diré a mis padres que contactemos al Wending Planner que le organizó la boda a mi primo Luke" Decía la mujer Camila solo se dedicaba a asentir.

-"Como tú prefieras nena" Comento Camila haciendo feliz a la ojiazul, quien volvió a abrazarse a ella con cariño, el cual Camila correspondió, eso hasta que su celular anuncio un nuevo mensaje recibido.

La castaña salió con cuidado de los brazos de su prometida, quien estaba en la nubes.

Camila tomo su móvil con cuidado con el fin de ver el texto recién llegado. Sabía perfectamente de quién se trataba.

Había pedido al destinatario dos noches antes, después de hablar con Bruce Keegan, verla para hablar con ella urgente.

Ella sabía perfectamente que Lauren tenía una vida complicada y bastante ocupada, por lo tanto entendía que apenas llegará esa respuesta afirmativa para verla esa misma noche.

Así que tuvo que decirle a Juliette que tenía una reunión de urgencia con Keegan a la cual no podía faltar.

Por supuesto Juliette se quedó con un tanto de renuencia, debido a que le hubiese gustado pasar el resto de la noche al lado de su prometida, celebrando su próximo matrimonio, pero de todas maneras cedió, al fin y al cabo tenían toda una vida para seguir disfrutando.

O al menos eso esperaba.

***

Lauren vio la fachada de la conocida casa al final del camino; respiró y aspiro hondo tratando de deshacerse de la ansiedad que se apoderó de su cuerpo. Debía admitir que le tenía muy incómoda el hecho de que Camila la haya citado de manera urgente en la casa, pero sobre todo sus nervios se debian principalmente que si o si, hoy mismo le daría la noticia que venía pensando hace tiempo y que ya había intentado darle en el encuentro anterior.

Primera AmanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora