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Oceano

Después de un día largo y el viento llegando a favor Yonhae decidió caminar sola por un momento en la hermosa playa. Una imagen realmente bella que reflejaba una chica solitaria caminando en la arena y en una apuesta de Sol próxima. Si esa sensación de que algo de aire puro se podía respirar.

Ella vestía tan ligera y libre que quizás si pudiese volaria como una mariposa en el cielo azul naranja.

Ahora que le pensaba mejor ni siquiera sabía porque había escapado del hotel, Jungkook dormía, su padre estaba ocupado como toda la vida y digamos que su "madrastra" ahora no se encontraba en Busán sino en otro lugar. Ella llegaría mañana por la noche el día de la cena y ahora literalmente se encontraba disfrutando de esa tranquilidad.

— Tengo miedo de que mis sospechas sean reales — abrazo un poco de sus brazos dando leves masajes sobre ellos — todo concuerda, pero nada tiene sucesión. — Caminó mirando como sus pies dejaban marcas en la arena. No recordaba que la sensación se sintiera tan agradable en sus pies.

Una corazonada le decía que algo no andaba bien que algo malo iba a pasar. Una tragedia.

— ¡Señorita Lee! — escucho a un hombre gritarle y ella inmediatamente volteo. Su paz había desaparecido.

— Señor Park — pero tampoco iba a ser tan mal educada, pues a pesar de todo Jimin se había comportado diferente después de tanto tiempo. Ya no era el mismo — Ha llegado — lo miro mejor y podía notar en el hombre ese estilo playero y juguetón. Le quedaba bien

— Llegué antes que todos — cuando por fin se acercó detuvo su paso frenéticamente. Algo no andaba bien y lo veía en el rostro de Yon, su expresión tenía un pesar. — ¿Se encuentra bien?

— Nunca e estado bien señor Park — sacó una sonrisa seguido de un suspiro largo — creo que sigo pensando que la muerte es la mejor solución o quizás solo sea un acto para ponerme a prueba — Ella comenzó a caminar dejando a Jimin detrás suyo.

Cuando la primera sensación de no ser valorado y sentir que el mundo está en tu contra duele. Era una chica con problemas, mucho antes del accidente no estaba bien mentalmente y sus padres como ella lo habían dejado de lado.

Todo se remoto a que ella solo estaba haciendo berrinches que sus acciones solo eran cosas para llamarla atención y realmente es que Lee estaba mal consigo misma. Una batalla que aún no podía ganar con su yo interno, quizás olvidó todo, pero seguía siendo la misma.

— ¡Yonhae! — nuevamente Park Grito y tocó el hombro de la chica para que ella pudiera girar su torso a él — Te amo...

— Sabes mi respuesta ¿No? — su mirada se volvió cruda y aterradora. No era de esperarse no estaba para escuchar las palabras de Jimin, ahora que recordaba algunas cosas — ya basta con estos juegos. Hace tiempo dijiste que me odiabas — Jimin se detuvo. Ella lo recordaba — si acepte que formarás parte de esto fue porque eficiente con tu trabajo, si dejo que sigas aquí es porque a pesar de todo siempre te has mostrado fiel y leal ante las cuestiones de la empresa, o bueno a excepción del matrimonio arreglado siempre lo has hecho.

— Ahora te desconozco tanto — sonrió amargo

— Pues ahora somos dos, yo siempre lo e desconocido.

— ¡Por qué no puedes perdonarme! — tomó las manos de Yonhae cuando está volteo a verlo, pero ell soltó su agarre en un jalón.

— Porque jamás ha dicho lo siento — Jimin quedó mudo.

Tenía tanta razón. Le exigía algo de lo cual no podía estar exigiendo, durante tanto tiempo Jimin solo se había preocupado por su propios sentimientos siendo egoísta. Decía quererla, pero parecía que el mismo no podía tomar esa palabra con exactitud.

Su cabeza lo estaba aprisionando en ese lugar obscuro.

— Park, secretario Park no entiendo porque ahora está actuando de esta forma — el viento pego contra su rostro y su cabello se vio ligeramente movido — Porque no ha dejado se ser un Hipócrita. Viene a quitarme la paz y la tranquilidad de mi aura.

— Me preocupa

— ¿Le preocupo? Realmente lo dudo.

— Por un día no escuché al secretario Park, sino a Jimin.

Después de eso Yonhae accedió, tampoco se iba a quedar a pelear o quedar con un mal disgusto, si algo tenía que pasar que fuera ahora o nunca. De todos modos siempre iba a terminar de la misma forma.

Jimin se acercó a su lado y ambos comenzaron a caminar y a caminar. Park no sabía ni por dónde empezar simplemente la vio ahí y decidió correr tras ella, fue un impulso incluso su tacto y esa voz dulce al acercarse a ella. Yonhae lo estaba volviendo loco y ahora con dos hombres detrás de ella ya no sabía que era lo mejor para joven.

¿Acaso debería dejarla libre? Y simplemente dejarla ser feliz con la persona incorrecta. Tal vez si o tal vez no con la persona incorrecta precisamente. Él tenía tela de dónde sacar, pruebas que no solo implicaban a Gyeonghui sino a Jungkook y la estafa. Tal vez era momento de que supiera la verdad... Pero estaba en duda si hacerlo o no.

— Cuando viajas de un mundo a otro lo que menos te preguntas es ¿Quienes? Sino ¿Quien?

— Vaya reflexión lo saco de internet — se burló

— Yonhae ¿sientes algo por Jeon Jungkook? — se detuvo en seco y de la misma forma el lo hizo, dejando amabas manos dentro de sus bolsillos — El en serio te hace feliz.

— Define felicidad. — se mantuvo unos cuantos callada y luego volvío hablar — si la felicidad es gozar de la plenitud que te da esa persona o algo que no sea precisamente alguien, sí, me hace feliz.

— Ya veo — bajo un poco la cabeza en sumisión. Estaba claro que ya no podía hacer más, no podía seguir rogándole y tampoco dejar que su vida se fuera simplemente a la obsesión. Quería a Lee, pero momento de dejarla libre.

Eso lo tenía muy en cuenta desde hace un par de días cuando vio como Yonhae sonreía junto a Jungkook sin siquiera fingirlo. Le había dolido porque incluso con él jamás se mostró de esa forma, porque incluso él al ser su primer amor ella nunca había mostrado esa felicidad como lo hacía con Jeon. Le dolía, pero tampoco quería ser ese trago amargo, estaría para ella, la apoyaría siempre, porque Yonhae era su alma gemela esa persona que nunca olvidaría.

— Tal vez llegue tarde — sonrió y después rasco su nuca — pero aún antes de que algo más pase — se arrodilló frente a ella y tomó su mano con un tono de voz quebradizo — quiero que me perdones por todo el mal que te hice pasar, por cada lágrima que derramaste — sus ojos cristalizaron — Yonhae te pido perdón por hacer cosas malas en tu contra por haber formado parte de las personas que te dañaron. Nunca me cansaré de decirlo incluso si me llegas a olvidar nuevamente siempre te lo diré. Te amo coco...

Lee igualmente sonrió, se acuchilló y con una mano en la mejilla en el rostro de Jimin limpió la pequeña gota que resbaló sobre está.

— Te perdonó — y lo abrazo — Jimin-sshi...

— Jamás debí ser un egoísta, jamás debí lastimarte... jamás









No falta agregar nada verdad. Ok, ok

TRAICIÓN 반역 Completa✓Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ