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Amor de mi vida,
me has hecho daño

Claude toma un baño algo largo ganandose asi una caminata llena de quejas por los jardines imperiales.

- Te dije que fueras rápido!

-Ya dije que lo siento.

-Pues no lo parece!

Penelope cruza sus brazos por debajo de sus pechos haciendo que se levante y luzcan mas grandes y redondos.

El ha notado como las sirvientas mas jóvenes intentan lucir sus pechos, sobretodo delante de Anastacius. El sabía lo que buscaban de él, por eso le molestaba que Anastacius fuera muy amable con ellas.

El nunca ha pensado en acostarse con alguna mujer de la sociedad, con alguna de las sirvientas que los persiguen a él y Anastacius o con Penelope.

Pero cuando piensa en esa mujer de cabello dorado siente como el deseo comienza a surgir en su pecho. Esa mujer que hace que su cabeza se nuble y que su corazón comience a latir tan de prisa.

Es un sentimiento que no puede explicar. Además ahora que aparece en sus sueños se ha vuelto un problema.

Quiere deshacerse de esa sensación pero no sabe como. Y ahora que Anastacius se fue, por lo que dijo, solo tiene a Penelope para sacar sus frustraciones, pero no de la manera que quiere. Sabe que si lo intentará Penelope le cortaría las manos y él no cree que lograrían aliviarse el uno al otro.

¿Penelope tiene a alguien con quien aliviarse?

-Penelope tu ya te has acostado con alguien?

Ella se detiene y mira a su alrededor. Después mira a Claude con los ojos muy abiertos y murmura una maldición.

-Acaso es una pregunta que tengas que decir como si nada. Idiota.

-Pregunte porqué sabia que estábamos solos.

-Haa... Bueno.

Ella suspira y lleva a Claude hasta la parte mas profunda de los jardines.

-Pero claro que no! Sabes que las mujeres no son libres de salir y acostarse con cuantos quieran. Para empezar no somo libres de salir de nuestras casas asi como así.

Lo dice algo ofendida pero también molesta por como las trata la sociedad.

Penelope es una mujer hermosa, si fuera un hombre seguiría manteniendo su atractivo el esta seguro de eso. Y también de que habría disfrutado más libertades. Ahora solo esta atada a un compromiso con él. Claude es una de las tantas cadenas que no la dejan vivir como ella quisiera.

- Y tu? seguro que ya lo hiciste por eso estas-

-No. No es asi.

-Eehh!!?? Pero si vi marcas en tu cuello! Es imposible que-

-Solo nos tocamos. No hicimos nada más.

-Ya veo...

Ella murmura.

-Y quién la va a meter? Dime dime dimeeee...

-Ugh, no debi contarte nada.

-Oye! tu empezaste!

Claude se levanta y comienza a caminar lejos del lugar. Ella intenta alcanzarlo pero uno de los tacones se le sale.

-Oye no me dejes atrás! Clauudee!

***

-Chloe no crees que es mejor si solo lo celebramos con tu familia y la realeza de Siwa. No es necesario que venga alguien de Obelia.

Benim gökyüzüm  ➳  Princesa Encantadora Where stories live. Discover now