JUJUTSU KAISEN |One Shots|

《Yuuji Itadori》

Advertencia: posible Spoiler(?.

Escuchar el "Me gustas, por favor... sal conmigo" de la persona que más te gusta debería hacerte sentir infinitamente feliz. Lastimosamente este no era el caso.

—No se como decirte esto T/n... —dijo rascando su nuca con nervios—. No puedo aceptar tus sentimientos.

Tus grandes esperanzas, el autestima suficiente y la gran confianza que habías conseguido se fueron abajo.

—Yo... entiendo. Con permiso. —hiciste una reverencia por cortesía y te fuiste.

Te vio irse sin decir nada más. Aunque en su corazón quería detenerte y explicarte el por qué, pero su conciencia lo detuvo.

"Yo... quiero que T/n sea feliz, no quiero que sufra cuando el propósito por el cual estoy aquí sea cumplido. Simplemente quiero que viva una plena y larga vida, aunque yo no estaré en ella".  Dijo para si mismo mientras caminaba a paso lento a la dirección contraria.

La verdad era que la amaba; tanto que quería protegerla tanto del dolor físico como mental.

Semanas atrás...

—¡Le diré que me gusta! La invitare a salir; la llevaré al zoológico, luego por un helado, a comer y al final se lo confesaré. —dijo con confianza mientras dibujaba tu nombre junto al suyo con una X en medio, el corazón rodeando los nunca falto.

—¡JAJAJAJAJA! ¿De verdad crees que aceptara? Solo mírate, mocoso. —carcajeo la maldicion desde su mejilla.

—¿Por que crees que dira que no? No sabes de estas cosas. —cruzó de brazos.

—Mocoso, serás ejecutado tarde o temprano, lo que sea. La dejaras sola y eso nunca te lo perdonará, aún muerto te odiara. —volvió a reír—. Dime, ¿acaso quieres darle falsas esperanzas para luego morir? Seria algo verdaderamente estupido. Acéptalo, nunca podrán estar juntos. —término.

Aquella "platica" con su invasor de cuerpo le hizo cambiar de opinión y reinicio su forma de pensar, fue como un golpe a la realidad, un gran golpe.

Esa noche no pudo dormir, ni la siguiente, ni la otro semana, así hasta llegar al día de hoy. Todas esas noches pensaba lo egoísta que sería de su parte confesarse, ya que si aceptabas tendrías que soportar el dolor del mañana con tal de poder tener la felicidad de hoy.

Actualidad...

—¡¿Te dijo que no?!. —grito Nobara llamando la atención del azabache también.

—¿De que están hablando?. —se unió a la conversación también, ya que habían interrumpido su lectura.

—El idiota de Itadori la rechazó, ¿que se cree ese bastardo?. —dijo enojada dispuesta a ir a buscarlo para darle una paliza, pero el azabache intervino de nuevo.

—No se preocupen por eso. —les regalaste una frágil sonrisa para calmarlos un poco.

—¡Hola mis queridos alumnos! Lastimosamente Yuuji-Kun no podrá venir a esta misión, pero no se desanimen que su profesor favorito estará para cuidarlos. —dijo dramático mientras los acompañaba a la salida para ir a dicha misión.

Mientras tanto Yuuji, él estaba llorando en su habitación. Se sentía terriblemente mal por rechazar tus sentimientos. Él ahora lo que necesitaba era un abrazo u Consuelo de  algún adulto, cualquiera que no fuera Satoru claro.

Agarro su teléfono y busco en sus contactos uno en específico.

—Habla Nanami Kento. —respondió el de la línea contraria.

Contando sus problema con algo de dificultad a aquel adulto que tenía toda su confianza.

—Por lo que me has contado no estás muy bien Itadori-Kun... —murmuró teniendo un poco de empatía con su retoño.

—¿Podrías darme algún concejo?. —dijo decaido.

—Eres joven, eres fuerte, eres carismático, eres el tipo de chico que se merece una chica como T/n, y la vida no está para vivir con arrepentimientos. A lo que voy es que deberías contarle tus sentimientos; abrirte con ella y vivir el resto de tu vida siendo feliz a su lado. Aprovecha el tiempo que te queda viviendo la vida que ambos se merecen. Se feliz Itadori-Kun y hazla feliz.

Tanto como Nanami, como Satoru querían ver feliz a Yuuji, es su muchacho y nadie quiere ver a sus alumnos vivir una vida desgraciada a esa edad, claro que no.

Las palabras de aquel rubio con sabiduría lo hicieron cambiar de opinión, dejando las palabras de Sukuna a un lado y tomar la iniciativa bien esta vez. Agradeció el concejo y colgó, luego salió de su habitación en busca de la chica para al fin abrir su corazón y hacerla feliz.

Estando en la entrada de la escuela se encontró con sus compañeros; Megumi, Nobara, su Sensei... pero no estaba T/n.

—Hola chicos, ¿dónde está T/n?. —pregunto viendo para todos los lados hasta encontrarse con las miradas de sus compañeros, unas miradas para nada conocidas—. ¿Por qué esa cara? ¿Algo sucedió?.

Fue en ese momento donde Nobara quebró en llando. El peli rosa estaba entrando en pánico. Nunca había visto llorar a Nobara...

—T/n... falleció.

Se me ocurrió en clase de medicina, lol. Llore.

No me odien xfa, quería matar a la T/n un rato nomas, pero si se murió (para confirmar).

Mejor me callo.

Bay ♡.