Manager al rescate

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"Mn. ¿Cuál es tu nombre?"

Xiao Zhan se congeló con su taza medidora hasta la mitad del tarro de arroz. Algo le dio un golpe en el pecho, un gemido que reprimió con demasiado esfuerzo. Tragó y se aclaró la garganta. "Mi nombre es Xiao Zhan. Tú ... puedes llamarme Zhan-ge".

"Zhan-ge". Yibo asintió, como satisfecho. "Zhan-ge, no quiero congee".

Xiao Zhan suspiró, dejando su taza medidora. Al adulto Yibo le gustaba el congee. El Yibo adulto se comía todo lo que le pusiera delante en gran medida. "¿Entonces qué quieres?"

"Un mantou [1]. Jugo de naranja", declaró Yibo con decisión.

Xiao Zhan se rió a carcajadas. Está bien. "Yo puedo hacer eso." Se dio la vuelta y fue a hurgar en su congelador en busca de bollos congelados para cocinar al vapor. Encontró un paquete medio abierto en el fondo y lo sacó. Para cuando se dio la vuelta, Yibo de alguna manera se las había arreglado para subirse a un taburete y miraba a su alrededor con curiosidad. Bunny todavía estaba agarrado a sus brazos.

"¿Vives solo? ¿Dónde están tu mamá y tu papá?"

Xiao Zhan, con la esperanza de desviar la conversación de los padres de cualquier tipo, respondió rápidamente: "Vivo solo".

"¿No te aburres?"

¿Dónde vives? quería preguntar. ¿Qué sabes de tu vida?

Justo en ese momento, el teléfono de Yibo volvió a sonar. Xiao Zhan corrió hacia el sofá y lo agarró. Respiró hondo y lo contestó. "¿Hola?"

"Uh ... ¿Yibo?" La manager de Yibo -Zhai Meixiang- preguntó con cautela.

"No, lo siento, no lo es. Uhm. Esto." Sus gerentes sabían de ellos, tenían que hacerlo, para ayudar a mantener las cosas en secreto, pero aún era extraño admitir lo cerca que estaban en las órbitas del otro. Xiao Zhan se mordió el labio y dijo: "Este es Xiao Zhan".

"Oh. Hola." Una pausa. "¿Yibo está disponible?"

La garganta de Xiao Zhan se cerró. Miró hacia dónde el pequeño Yibo lo miraba con curiosidad y acariciaba al conejito en sus brazos. "Él ... no lo está."

"Oookaaay ... ¿sabes dónde está? Llega tarde a una reunión, y esto no es propio de él".

No, no lo era. Yibo era un profesional consumado, sacrificando su propio bienestar para asegurarse de que nadie lo esperaba. Xiao Zhan se dejó caer en el sofá. "Yo ... yo sé dónde está."

"¿Y?" La voz de Zhai Meixiang sonaba más urgente ahora.

"Y nosotros ... puede que tengamos un pequeño problema". Tragó, luego cerró los ojos. "¿Puedes venir?"

                                                              ~*~

Mientras esperaba a que Meixiang llegara, Xiao Zhan cocinó algunos bollos al vapor y luego le sirvió a Yibo un gran vaso de jugo de naranja. Yibo bebió cuarto del vaso de una vez, eructó y luego se comió los bollos. Sus mejillas se hicieron increíblemente más grandes mientras masticaba con la boca abierta y Xiao Zhan, rompiendo su propio bollo en una pequeña pieza a la vez, se encontró sonriendo sin poder hacer nada. "¿Esta bien?" preguntó.

Yibo asintió y luego tragó. "Rico" Demolió un bollo y medio antes de apartar el plato y deslizarse por el taburete. "Estoy aburrido. Vamos a jugar".

Xiao Zhan, que no tenía idea de cómo se entretenía a los niños, entró en pánico. "Uhm. ¿Qué quieres jugar?"

"¿Tienes Legos?" Xiao Zhan negó con la cabeza. "¿Carros?" Otro movimiento de cabeza. "¿Algún juego?" Xiao Zhan se encogió de hombros impotente. Yibo dejó escapar un suspiro. "¿Qué tienes?"

Finding YiboOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz