(+18) Ultraviolence

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MATTHEO

¿T/n y Tom?, ¿Como podía ser eso posible?, hubiera esperado que saliera con cualquiera, en serio con cualquiera, incluso con Potter, ¿Pero con mi hermano?, la sola idea me producía nauseas y... celos.

El profesor Snape no hablo hasta que llegamos a la oficina de Dumbledore.

—Entre señor Riddle — dijo el abriendo la puerta. Obedecí y entre.

—¿T/n está bien? — ella era en lo único que podía pensar, no quería lastimarla, ella apareció de la nada y luego... la lastime. Otra vez.

—Se encuentra en la enfermería, pero se pondrá bien, es una joven fuerte — respondió con ese tono tranquilo que me ponía nerviosa, no era un secreto que mi hermano y yo no eramos sus alumnos favoritos ni muchos menos, aunque al menos me daba un poco de seguridad no ver un ápice de furia en su rostro sabiendo lo mucho que apreciaba a T/n, ella si que era su alumna favorita.

—Yo no quería herirla.

—Lo se Riddle, lo se... — Dumbledore se sentó frente a mi y puso sus manos entrelazadas sobre su regazo —Cabe recalcar, que lo que hiciste fue algo muy grave, pelear frente a tus compañeros, enviar a una alumna a la enfermería y una lista desfavorable de tu amor por quebrantar las reglas ameritan tu expulsión, ¿Verdad?

Trague grueso y baje la cabeza. No podían expulsarme. No, si podían hacerlo —Si profesor...

—Pero creo que enviarte a casa no ayudaría en nada, en cambio, el servicio comunitario te haría un mejor bien.

Lo mire confundido —¿E-enserio?

—Si.

Me puse de pie tomando su mano y estrechándola en una forma de agradecimiento.

—Tranquilo muchacho, tranquilo — aparte mi mano rapido y el volvió a su posición —Ayudaras en el hospital San Mungo todos los fines de semana hasta que yo decida el momento apropiado para levantar el castigo.

Asentí aceptando todas sus ordenes. Ayudar en el hospital era mejor que irme a casa y apartarme de T/n, aun necesitaba saber lo que sucedía, no era normal su relación con Tom. Me fui a mi habitación pero no pude conciliar el sueño. Cada vez que cerraba los ojos ella venia a mi mente, ella y la imagen de como Tom tomaba su mano, como si fuera su dueño.

Cuando amaneció salí al jardín y tome algunas flores coloridas. Me fui a la enfermería pero cuando quería pasar la sangre sucia me lo impidió.

—Vete de aquí Riddle.

—Solo quiero hablar con ella, ver como esta — insistí. Mis intenciones eran buenas, podía jurarlo.

—Eso nunca — esa fue la chica Weasley —Has una cosa buena y lárgate.

Chasquee la lengua y les extendí el ramo de flores —Podrían al menos dárselas por mi y decirle que lo lamento.

La chica Weasley tomo las flores. Di media vuelta y me fui a San Mungo, mi castigo empezaba hoy.

T/N

Me desperté en la enfermería. Sentía los parpados pesados y un fuerte dolor en la parte trasera de mi cabeza, como si me hubiera arrollado un tractor. Solté un pequeño gemido de dolor mientras me incorporaba en la camilla.