crush culture [johnten]

- the king ⚽️

— Tengo una cita el viernes con Snoopy.— Dijo el ahora pelirrojo Xuxi. Asumo que Snoopy es un apodo para Jungwoo, no entiendo para qué saldrán a una cita si ya se besaron y ya saben que se gustan,
¿No es mejor solo empezar a ser novios?

— Ah, ¿Lo vas a invitar a tu casa o algo? —Pregunté desinteresado mientras comía mi almuerzo.

— ¿Qué? No, quiero ser un caballero con él y si hago eso sus padres no me aceptarán como su novio, iremos lento.

— Creí que ya eran novios.

— Casi.— En ese momento Johnny, a quien había estado evitando todo el día, apareció en la cancha de fútbol para la práctica de después de almuerzo. Normalmente me gustaría verlo, pero no quiero que sea incómodo luego de lo de hace unos días.

— Hey, ¿terminaron de comer?— Win apareció de repente en nuestras espaldas y se sentó entre nosotros. — ¿Por qué miras feo a Johnny? ¿Ya vas a contarme que pasó luego de la fiesta?

— ¿Pasó algo luego de la fiesta? ¿Y no me contaste? — Lucas se hizo el ofendido.

— N-no, nada pasó, Winwin y no les contaría aunque así fuera, no quiero dramas ni rumores. —Dije sonrojado aunque por dentro me moría por contarles lo del beso. ¿Qué me está pasando?

— Hey, Ten, ¿te veo luego de la práctica? Necesito hablar. — Hablando del rey de Roma, el poste con patas se acercó a las graderías haciendo que todas las chicas igual de antisociales que nosotros suspiren.

— Uhh... supongo. — Asentí y traté de ignorarlo para que se fuera. Sicheng y Yukhei me miraban indescifrablemente.

Johnny musitó un okay en tono bajo y bajó para volver a la cancha, no sin antes lanzarme un guiño. Es como si pensara que es el rey de mi corazón, sabe que me gusta, estoy en una posición vulnerable.

— Definitivamente pasó algo, y nos vas a contar ahora mismo. — Los miré a ambos con molestia.

— ¿Quién los manda a ser tan metiches, eh? — Tomé un pedazo de carne de la caja de Lucas y la acerqué a mi boca, antes de que pudiera saborearlo Winwin golpeó mi mano para evitar que saciara mi hambre.— ¡Hey!

— Cuéntanos. — El menor de los tres dijo casi gritando y me rendí.

— Okay, oigan, no le cuenten  a nadie más ¿Vale? ni siquiera es algo tan importante. — Ambos asintieron a mi petición y comencé a contarles lo que había ocurrido restándole gran importancia, no quería que pensaran que me gusta Johnny o algo.

— Oh, entonces se gustan, ¡Que lindo es el amor! —Exclamó Sicheng haciendo ojos de corazón.

— No, no entiendes, no le gusto y a mi no me gusta, seguro él solo quiso ayudarme. — Resoplé y miré hacia el lado para ocultar mi leve sonrojo.

— Vamos, nadie ayuda a alguien de esa forma solo por cortesía, a menos que seas raro. — Lucas tenía razón, pero no iba a admitirlo. — De hecho, yo creo que quiere pedirte algo más tarde.

— ¿De que hablas?

— No sé, solo ve con la corriente.

Cuando el almuerzo terminó me bajaron los nervios, en 45 minutos iba a tener que hablar con él y no tenía idea de qué hablaríamos. ¿Quiere pedirme que seamos algo? ¿Debería decirle que sí? No lo conozco lo suficiente para eso, no puedo.

Tendré que esperar.