Entre integrales

Capitulo 40: Wedding

Aclaración antes de comenzar.

En el capítulo encontrarás un ritual indigena de una tribu de Chile austral, quiero aclarar que no es exactamente así el ritual de casamiento, tiene parte de fantasía y otra mini parte de realidad. Aclaro esto porque no quiero mal entendidos, es solo que quería resaltar esas tradiciones antiguas que se han ido olvidando.

No siendo mas, espero les guste el capitulo

Hannah

Hemos estado una semana en la cabaña de sus padres, Robert insistió que lo mejor que podía hacer era despejarme antes de comenzar a buscar trabajo o que hacer con mi futuro.

Estoy sentada en la mesa de desayuno tomando una taza de chocolate caliente y un par de tostadas, observando el patio trasero lleno de árboles de la cabaña, amo estar acá, la casa es tan reconfortante y relajante que tengo que admitir que no quiero irme nunca.

Jugueteo con mi anillo, hace una semana estoy comprometida y aun no alcanzo mis 30 años, pero me siento en éxtasis, estoy feliz por haber dicho que sí, pero también tengo un vacío de no saber en qué trabajare o con que conseguiré dinero.

-¿En qué piensas?- Me interrumpe Robert entrando en la cocina con una toalla en el cuello, una sudadera y su torso aun mojado.

-En el futuro- Susurro, Robert hace una mueca y me abraza por la espalda.

-Espero estar en él- Dejó la taza y me volteo para hacerle frente.

-Eres mi futuro esposo, siempre estarás en él- Me sonríe y me besa tiernamente.

-Arréglate, tengo algo preparado, te deje un regalo en la habitación- Me guiña un ojo y me hace levantar. -Anda no tenemos tiempo- Me da una nalgada que me hace soltar un chillido y luego una risita.

Entró en la habitación de invitados en la que estamos durmiendo los dos, miro una caja blanca grande con una cintilla que la amarra completamente y así lado hay una bolsa de papel totalmente blanca con una nota legible que decora. "Abreme"

Extrañada indago que hay dentro y para mi sorpresa encuentro un conjunto de lencería de color blanco. ¿qué es esto?, alarmada abro la caja y me encuentro un vestido blanco de seda muy hermoso se abre ante mi.

¿Qué carajos?

-ROBERT- Gritó desde el segundo piso, escuchó un cuchicheo en la planta baja, unos pasos y para mi sorpresa la señora Jones entra por la puerta de la habitación.

-Hola Hannah- Me saluda con su mirada tierna y maternal.

-Señora Jones- Musito intimidada por su presencia, -¿que...?-Frenó en seco cuando ella saca un traje de novio del armario. ¿pero que...?

-Solo tengo que decir que nos llegó un encargo hace dos días, Robert nos indico unas cosas anoche mientras dormías y que te ayudará con todo el día de hoy- Pestañeo, estoy totalmente confundida y no se que está pasando acá.

-El te ama, déjate llevar por sus locuras, a veces son buenas- Me sonríe y sale nuevamente de la habitación junto con el traje. La sigo bajando a la primera planta y miro como la señora Jones le entrega el traje a Robert.

-¿Está enojada?-Le susurra Robert a la señora Jones.

-Bueno depende si me explicas o no que está pasando- Me cruzo de brazos, Robert alza su mirada y noto el nerviosismo en sus ojos.

-Creo que es hora de irnos Hilda- Musita Glen cuando entra en la sala. -Todo está preparado en la reserva, el cacique te espera antes del atardecer- Le da un apretón de manos y toma a la señora Jones de una de ellas.