Tenias que ser tu, BarcaGamer.

Capitulo 3

Había pasado una semana desde que  le había comentado a Roberto que saldría de viaje yo sola a Monterrey. Al principio no lo tomo muy bien. Pues Roberto y yo  siempre salíamos juntos de viaje. En estos días estuvimos hablando de lo que me molestaba y el dijo que hará las cosas mejor pero conozco a Roberto. 

Mi vuelo salía mañana por la mañana a si que Roberto y su novia me estaban ayudando a empacar ropa y algunas cosas más en una maleta familiar.

-¿Vas a volver, verdad?- pregunto Roberto metiendo una camiseta negra en la maleta-

-Si, claro que si- asentí guardando una camiseta blanca con un pequeño detalle en el centro. Era una de las camisetas de mi ex Daniel- 

-Debes tener cuidado, conozco a los chicos con los que vive Hasvik. No hagas mucho caso a Barca.

-¿Barca? Es el chico que se llama Diego ¿no?- el asintió- ¿Qué hay con el?

-Es un mujeriego- soltó con una risa- Es broma, pero creo que esta enamorado de ti.

-Que pendejadas dices Roberto- los tres reímos- No lo conozco ni me conoce-

-Cuñadita no necesitamos enamorarnos de alguien por verlo solo nos enamoramos por su carácter en este caso creo que ese chico se enamoro de ti por todo lo que Roberto les ha dicho de ti. 

-Estoy segura que ustedes dos están equivocados. En ese caso, ¿Qué hay de Victor? No me conoce pero de seguro hablan de mi con el- 

-Victor tiene novia.

-Supongo que ese tal Barca igual.

-Ustedes dos se van a llevar muuy bien- asintió Roberto con una sonrisa-

En Monterrey:

Baje del avión fui por mis maletas (solo una mochila y una maleta familiar donde llevaba lo necesario y unas pocas cosas de mi escuela, y también unas cosas que me había pedido Ilan. Jalé mi maleta hasta una pequeña banca del aeropuerto y me dispuse a mandarle un mensaje a Ilan que ya había bajado del avión. Unos minutos después me dejo en visto. Me dejo en visto, mi mejor amigo me dejo en visto. Que hijo de pu...

-¡MI MEJOR AMIGA!- eleve mi mirada ante ese grito, un chico con gorra vestido completamente de negro venia corriendo a mi dirección. Me puse de pie cuando lo reconocí y fui hasta el corriendo- ¡Pequeña bestia!- nos abrazamos- 

-Que pendejada!!- me separe de golpe y golpee su estomago con poca fuerza- ¡Como se te ocurre dejarme en visto, pedazo de escroto!-

-Perate pendeja - se quejo sobando su estomago- Ya estaba aquí, para que responderte- se agacho un poco para quejarse del golpe que le metí cuando me di cuenta que no venia solo, una chica y dos chicos venían con el-

-¡Ari!- grite emocionada mientras iba a abrazarla- 

-¡T/N!- nos separamos- Por poco a Hasvik se le pasaba contarme que vendrías.

-Típico de Ilan- bromeé abrazando a Juan- Hola soy T/N

-Soy Grady- me sonrió estrechando mano-

-El vive conmigo- explico Hasvik- Bueno T/N iremos a comer y después iremos a casa para que te acomodes.

-Si T/N tenemos que ponernos al corriente- dijo Ari tomándome del brazo para jalarme fuera del aeropuerto, Hasvik se encargo de mi equipaje-

Fuimos a comer los cinco, platicamos de muchas cosas. Grady se notaba que era un chico a toda madre. Ari estaba más hermosa de lo habitual, Juan siendo igual de grosero y Hasvik un mamele mami. ¿Qué como se eso? Bueno, tan bien e visto uno que otro video. 

-Tengo una mejor idea- hablo Ari en mitad del desayuno- Estuvimos  hablando, Juan y yo y creemos- Ari miro a Juan con una sonrisa-

-Creemos que lo mejor sería que vivieras con nosotros T/N- dijo Juan con una sonrisa-

-No- negó Hasvik- No.

-¿Por que no?- pregunte, la idea no era mala. Prefería vivir con personas que conozco a vivir con chicos....chicos- 

-Por que no, viniste aquí para vivir conmigo, Grady y Barca-

-Hasvik, creo que T/N se sentiría mejor viviendo con Ari- apoyo Grady- Digo, T/N me caíste muy bien pero no creo que quieras vivir con puros hombres.

Mire a Hasvik el estaba enojado comiendo en silenció con la cabeza baja.

-Es una idea muy buena, gracias chicos- mire a Ari y Juan- pero Ilan tiene razón- el nombrado elevo la cabeza- Vine por que el me lo pidió, y no vine a vivir contigo y tus amigos vine a pasar unas pocas vacaciones.

-¿Tenemos un pero en esa conversación, verdad?- pregunto Juan-

-Si me gusta esta ciudad puede que me venga a vivir aquí-

-¡Con nosotros!- grito emocionada Ari-

-Puede- sonreí-