Capítulo 31

1K 85 5
                                    

-Porque tenía miedo.- Soltó provocando una carcajada en la rubia.

-¿En serio?- Dijo mirando su ordenador.

-Pues claro que es en serio- Soltó la otra mujer ofendida.

-Condena pendiente por fraude, cuentas bajo cero, deudas hasta con el demonio...- Dijo Emma leyendo desde el ordenador.

-¿Qué?- Preguntó sorprendida.

-Eso pone tu expediente.- Dijo la rubia que sonreía al darse cuenta las intenciones que su ex tenía.

-¿Cómo sabes eso?- Preguntó acercándose rápidamente a la rubia.

-Una de las ventajas que tiene ser sheriff es tener acceso a toda esa información.- Soltó Emma muy orgullosa por su brillante idea.

-Eres...- Espetó a punto de golpear a la rubia.

-Te puedo detener por eso. Acusarte de golpear a un agente y de muchas otras cosas.- Dijo Emma levantándose de la silla para mirarla a los ojos.- Ha sido fácil descubrirte Kathryn.- Aseguró Emma.

-Yo no he venido por eso... yo sólo quería arreglar las cosa contigo.- Dijo intentando convencer a la rubia aunque sin éxito.

-Sólo querías que yo te pagase las deudas.- Dijo Emma sonriendo.- Te equivocas de persona, aquella Emma Swan ya no existe, ya no soy la mujer que casi suplicaba por una buena palabra tuya, por un beso o por un rato juntas. – Aseguró la rubia mirándola fijamente a los ojos.

-Emma... esto...no- Dijo casi tartamudeando.

-Kathryn no te hundas más. Márchate y déjame ser feliz.- Dijo Emma.- No creo que después de lo que hiciste tengas la poca vergüenza de seguir insistiendo. Ya lo he superado, no siento nada por ti y eso no va a cambiar, no me obligues a hacer algo que no quiero.

-¿Es una amenazada?- Dijo casi en un susurro.

-Yo no amenazo.- Dijo Emma sin subir la voz.- Sólo quiero que te marches y me dejes en paz.

-Pero... no puedo hacer eso... yo...- Kathryn comenzaba a ponerse nerviosa, gesticulaba y se movía demasiado, Emma la conocía y sabía que escondía algo.

-¿Qué pasa? – Preguntó sin demasiado interés.

-Emma si me marchó correré peligro.- Aseguró Kathryn aunque Emma no parecía creerle.

-No creo que tus deudas sean tan grandes, trabaja y paga lo que debes yo lo hice en su momento.- Soltó Emma mirándola.

-Emma, si me marchó de aquí sin ti no lo contaré.- Aseguró y esta vez Emma si la creyó, su instinto le decía que decía la verdad.

-Kathryn no vas a conseguir que deje a Regina, ríndete de una vez y soluciona tu vida- Dijo intentando hacerla entrar al razón.

-¡Mierda, Emma!- Gritó- Una mujer me ha amenazada.- Soltó sin pensarlo demasiado.

-¿Qué?- Preguntó Emma que no sabía si eso podía ser verdad o no.

-Sí.- Aseguró mirándola a los ojos con autentico pánico.- Yo no quería hacer esto, no quería volver a verte, había conseguido superar lo nuestro.- Dijo haciendo que Emma pusiese los ojos en blanco.- Sí, sé que todo fue culpa mía pero una vez que me di cuenta de lo que hice me hundí, casi acabo en la cárcel y después empecé a beber y a jugar hace unos meses que estoy limpia y estoy intentando arreglar mi vida pero llego esa mujer y me amenazo... no sabía qué hacer.- Dijo muy rápido gesticulando mucho y sin darle tiempo a la rubia a procesar lo que decía.

-Kathryn...- Dijo Emma en tono cansado.

-Entiendo que no me creas.- Dijo la mujer saliendo por la puerta de la comisaria.

Las apariencias engañan.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora