Trueno

Cuarenta y siete

Tati

Me desperte y me tranquilice al ver a Mateo al lado. Extrañaba verlo así tan tranquilo, tan en paz... siempre me transmitía esa tranquilidad que lo caracterizaba.

— mmm... — se quejó Mateo desperezandose — ey... — dijo él cuando me vio mirandolo

— hola... — hablé con tranquilidad

— ¿que hacías? — preguntó mirandome con los ojitos chinos y las ojeras marcadas

— te miraba...

— ¿tan feo estoy? — preguntó con una sonrisa y la voz ronca

— no, estas muy lindo... siempre me pareciste un pibe re lindo... osea el primer día que te vi ya te quería comer la boca... me la re bajaste cuando me dijiste que tenias novia... — sonreí recordando aquellos momentos mientras le hablaba tranquila

— mirala a la atrevida... — sonrió él haciendo un leve puchero — igual vos tambien me volaste el bocho desde el principio, tipo te vi la primera vez en la plaza y dije fuaaa que buena que esta... ig de la minita... ahre

— re que estabas re casado vos... ¿que te haces? — solté subiendome encima de él sintiendo sus manos sobre mi cintura al instante

— en serio tonta... osea mi ex no era fea piba pero vos desde el principio fue como... nose... estuvimos tan conectados como que re en la misma sintonia y eso con ella no me paso nunca en los dos años que fuimos novios...

— espero que volvamos a estar en la misma sintonia algun dia entonces... — suspire deseando que todo volviera a ser como antes

— seguro que si... y si no lo estamos vamos a ir cambiando de frecuencia hasta encontrarnos... no te preocupes... — sonrío él acariciando mi cara para luego acercarme para que le diera un beso

Nos quedamos un buen rato abrazados, lo necesitabamos, estos meses en los que habiamos estados separados habian sido los peores de mi vida. Lo unico que queria en ese momento era quedarme con Mateo así hasta el fin del mundo, sin nada ni nadie que nos jodiera.

— ¿estas seguro? — pregunté una vez mas. Era demasiada la plata que necesitaba, y no queria ponerlo en un compromiso tan grande

— Tati... — suspiro tomandome suavemente de la cara para que lo viera a los ojos — si tengo que salir a robar para sacarte de ahí, lo hago... — sonrío dejando un beso en mi frente

Nunca nadie me había querido de esa manera, no sabía lo que se sentía no sabía como reaccionar.

— yo... te juro que... no se como agradecerte... nose como... — solté con la voz entrecortada

— no tenes que hacer nada... con que estés conmigo me alcanza y me sobra... — me respondió dandome un beso cortito

Mateo se fue un rato a su casa. Yo me quede juntando mis cosas, en cuanto pudiera me iba a mudar con él.

Me dolía que la relación con mi vieja fuera así, me dolía que mi vieja no me quisiera tanto como yo la quería a ella pero era lo que había. Tenía que mirar para delante, tenia que dejar todo esto atras y centrarme en una mejor vida.

Me puse la ropa interior mas horrible y la ropa mas ancha de todo mi placard antes de que Mateo me pasara a buscar. Despues de tantas noches no podía creer que pudiera ir a ese lugar de esa manera.

— ¿estas bien? — preguntó él cuando llego a mi casa

— si... quiero que todo esto se termine de una buena vez... — suspire cansada mirandolo a los ojos. Él se hacía el que no pero se que estaba igual de cagado que yo. Ese lugar no era joda y los dos lo teniamos muy claro.

— en un toque viene un amigo, que nos va a llevar... ni en pedo vamos en bondi... — soltó mientras se comía las uñas y escupia una de estas a su lado

— ¿estas seguro? mira que si no voy yo sola... no quiero exponerte... por eso no te queria contar nada... pero aca estamos... — negué enojada conmigo misma. Al final estaba pasando todo lo que no quería que pasara

— Tati, amor... ya lo hablamos gorda... ojala me lo hubieras contado antes asi te podía ayudar y no pasabas por toda esta mierda... — dijo él metiendo sus manos por debajo de mi buzo para poder acariciar la piel de mi cintura

— espero que todo salga bien... no veo las horas de recuperarme de todo esto y estar tranquila con vos... trabajando en un chino de mierda y preocupandome por boludeces...

— va a salir todo bien... vamos a estar bien... mañana mismo empezamos a llevar las cosas a mi casa así te instalas y volvemos a la convivencia... — sonrió Mateo abrazandome con fuerza

Estando entre sus brazos, sintiendo su calor y su olor sentía que nada podía estar mal. Mateo era mi lugar en el mundo y eso lo tenía mas que claro.

— te amo... muchisimo... literalmente sos la persona que mas amo en el mundo... bue mucha competencia no tenes tampoco... — reí yo al ver su carita de embobado que me ponía cuando le decia esas cosas

— jajajaja yo tambien te amo muchisimo bebe... — sonrío él contento encajandome un beso a lo bruto

Nos quedamos un buen rato mas cargoseandonos hasta que su celular sonó, indicandonos que su amigo estaba afuera y que ya era hora de partir.

Agarre mis cosas y tragué saliva, pidiendole al cielo, a la vida, a Dios, o a quien sea que estuviera arriba que todo saliera bien, porque no me daba mas la existencia para más malas.

uenas pero miren quien apareció :0

ando media colgada pero hago lo que puedo

encima no me están dando ni bola en esta y me la re baja 😫

pero bueno fran termina lo que empieza así que acá estamos

yo no te quiero decir nada pero se va a empezar a picar más de lo que estaba picado te la dejo ahí noma