❥. ᭄ 𝐒𝐚𝐡𝐲𝐨 ★ Adaptación
❝ ¿Se han imaginado tener dos vidas? ¿Ser dos personas al mismo tiempo? Apuesto a que sí. Pero entre pensar y vivir hay una diferencia muy grande, creo. Imaginemos... Jihyo, una mujer dulce y dedicada. Jisoo, sexy e i...
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Minatozaki Sana's Point of View
Miami, Florida 8:34AM
Me había olvidado de lo caliente que podía ser Miami. Acostumbrada al clima de Japón, ahora este clima era extraño para mí, pensé mientras me despojaba del saco que usaba esa mañana. Caminé entre la gente que iba de un lado para otro, pegados a sus teléfonos celulares con conversaciones entretenidas. Cepillé mi cabello con mi mano, coloqué mis RayBan aviador en mi rostro, mientras me dirigía a la salida del aeropuerto de Miami. Una vez afuera vi el Mercedes negro esperándome.
— ¡Buen día, señorita Minatozaki! —el conductor habló de forma educada.
— ¡Buenos días, Jihoon! —hablé entrando en el carro.
Dentro del coche había una excelente temperatura gracias al milagroso aire acondicionado.
— ¡Por Dios! ¿Desde cuándo Miami es tan caliente? —murmuré dejando caer mis pertenencias en el asiento.
— Desde siempre, señorita, el clima aquí siempre fue caliente —escuché a Jihoon decir en medio de una leve risa. — Disculpe preguntar pero ¿cómo está su padre?
— Tienes razón, me he olvidado de cómo son las cosas aquí —hablé tranquilamente mientras me acomodaba en el asiento del coche. — Él está bien, está en Japón con mi familia.
— Eso es excelente, ¡me agrada el señor Minatozaki! ¿Para dónde debo llevarla? —preguntó mirando por el espejo retrovisor.
— A mi nuevo apartamento, Jihoon, sigue el camino por esa calle, yo le daré las coordenadas.
El señor asintió, saliendo de aquel lugar.
Mirando por la ventana del auto las calles de Miami, podía recordar mis tiempos vividos aquí, y qué buenos tiempos diría yo. Conocía aquella cuidad como la palma de mi mano. Después de todo, nunca fui esa Sana que solo pensaba en el trabajo. Había disfrutado un poco de la vida. Un poco no, mucho. Mis pensamientos vagaron por los recuerdos de todas las cosas que hice, pero ahora eso estaba en el pasado. La Sana inmadura e irresponsable ya no existía más.
— Gire a la izquierda en la siguiente cuadra —hablé al señor que obedecía mis coordenadas perfectamente.
Finalmente llegamos al edificio donde ahora estaría viviendo. Jihoon rápidamente salió del auto caminando en pasos largos hacia mi puerta, y la abrió.
— Gracias —dije con una sonrisa.
Jihoon era mi conductor desde que era joven y vivía con mis padres. Él era un señor mayor muy servicial por cierto. Siempre estaba dispuesto a trabajar, no importaba cuando fuese.
Caminé para dentro del vestíbulo del edificio, donde rápidamente los empleados se colocaron en sus debidos lugares. Era cómico como se comportaban en mi presencia, las personas a menudo se sentían nerviosas. Quizás sea la forma grosera y arrogante que ellos imaginaban que yo tendría, y no quería deshacer esa imagen. Hoy en día, para ser respetada la gente tenía que temer ante mi presencia.
