La mañana ya había comenzado para ambas mujeres; Pieck y ____ caminaban por las calles de Liberio mientras la primera buscaba con la vista al grupo de guerreros.
— ¡Pieck-san! ¡Aquí! — se escuchó una dulce voz.
La nombrada se giró en dirección a aquello, logrando ver a cuatro niños sonrientes y a dos hombres fornidos, se dirigieron hacia ellos con calma.
— ¡Pieck-san, me alegra qué venga con nosotros! — la misma dulce voz qué la llamó al principio volvió a sonar, era de un niño rubio cenizo.
— ¡Me gusta verla aquí, — otra niña de cabello castaño cobrizo oscuro habló emocionada — es muy díficil que usted pase tiempo con nosotros usualmente, me encanta que nos acompañe!
— Vamos, Gabi, no seas irrespetuosa con Pieck — regañó el Braun tomándola del hombro.
— Me agrada escuchar eso, niños — contestó riendo tranquilamente.
— Oh, señorita Pieck, ¿quién es ella? — preguntó un pelinegro de lentes señalando a la mujer castaña a lado de ésta, al instante los presentes fijaron su mirada en ella.
La portadora del titán carguero esbozó una suave sonrisa. — Ella es ____ — presentó mientras tomaba su mano delicadamente —, es mi novia.
Los niños frente a ella se mostraron sorprendidos por lo dicho por la guerrera, viéndola con las bocas formadas en una pequeña "o" y los ojos bien abiertos.
Ella se limitó a sonreírles de la misma forma en qué lo había hecho Pieck anteriormente, a la par que levantaba su mano desocupada en forma de saludo.
Porco, quién hasta el momento se había mantenido desinteresado de la breve conversación, habló. — Vaya, ¿aún la soldado, Pieck? — dijo mirándola de arriba a abajo —; o bueno, ¿lo era? — soltó cuando miró la muleta qué la ayudaba a sostenerse.
____ se incomodó notablemente, controlando sus impulsos acerca de sus pensamientos qué amenazaban con atacarla.
Ella de ninguna manera quería ser una molestia para nadie en el día e incluso hasta ese momento se reafirmó la pequeña idea de que quizá había sido una terrible decisión acompañar a Pieck, pero ya estaba allí junto a ellos y no podía hacer mucho al respecto, por lo que se mantuvo en calma.
— Porco, estás siendo un completo irrespetuoso también — volvió a regañar el fornido rubio.
La de cabellos oscuros estaba a nada de decir algo cuando el niño rubio se apresuró a decir. — ¡Es un gusto conocerla, señorita ____! Yo soy Falco.
La castaña se sorprendió ante el comentario del niño, al instante sintió su corazón derretirse ante la sincera sonrisa que éste esbozaba.
— ¿Pieck-san tiene una novia? — murmuró curiosa la niña de antes.
— Eso dice — respondió Porco con fastidio, Reiner no dudó un segundo más cuando lo tomó por los hombros y lo alejó de ahí mientras los cadetes conocían a ____.
— Claro, ella y yo llevamos un tiempo juntas — dijo la titán cambiante finalmente.
— Oh, ya veo, me llamo Gabi, soy prima de Reiner Braun — habló —; y ellos dos son Udo y Zofia — señaló a los dos niños junto a ella, sonriendo levemente.
