He Calls Me Love [Fred Weasley]

18 | Fuegos Artificiales

Era un sábado de Hogsmade y los gemelos se levantaron más temprano. No esperaban que T/n también estuviera despierta, ya estaba desayunando en el Gran Comedor. Los dos se sentaron a su alrededor, sirviéndose su propio desayuno.

—Ustedes se levantaron temprano un sábado– señaló T/n, mirandolos—. ¿Es una ocasión especial?

—Tenemos que conseguir algunas cosas en Hogsmade, así que decidimos levantarnos antes– respondió Fred.

—¿Qué necesitan? ¿Algo para las bromas?– T/n preguntó mientras comía de sus huevos revueltos. 

George asintió. 

—Algo como eso.

Los tres continuaron su desayuno, hablando como de costumbre, luego Hermione y Ginny se acercaron, habiendo terminado con su desayuno.  T/n se despidió de sus amigos, luego las chicas regresaron a la Torre de Gryffindor a buscar sus abrigos.

Hacía frío en Hogsmade, el pueblo todavía estaba cubierto de nieve. Las tres chicas iban de un lado a otro, hablando, riendo y de vez en cuando comprando. A lo largo del día, siguió viendo a Fred, George y Lee, cada vez con una bolsa o dos más, lo que la hizo preguntarse qué estaban planeando los tres y por qué no habían mencionado nada al respecto.

.・゜゜・

Después de haber encontrado todo lo que necesitaban, los tres chicos fueron a buscar cervezas de mantequilla y luego regresaron a Hogwarts. Se quitaron los abrigos cuando regresaron a su dormitorio y luego mudaron el contenido de las bolsas en sus camas, comenzando a ordenar todo. 

Hubo un golpe en la puerta, lo que provocó que los tres chicos se congelaran. ¿T/n ya había vuelto?  ¿Ella vendría a verlos? ¡Todavía no podía ver las cosas!

—¿Oigan, chicos? Somos Ron y Harry– se escuchó la voz de su hermano pequeño desde el otro lado y los tres suspiraron de alivio. Lee fue a la puerta y la abrió, dejando entrar a los dos de cuarto año.

—¿Qué estás planeando?–  preguntó Harry, observando los productos en sus camas— ¿Le harán una broma a alguien?

—No, en realidad– dijo George, luego colocó sus manos sobre los hombros de su gemelos y lo sacudió levemente— ¡Freddie le va a pedir a T/n que sea su novia!

—Espera, ¿aún no le has preguntado?– Preguntó Harry confundido—. Ella no ha mencionado que le preguntaste, pero asumí, ya que ustedes siempre son tan cariñosos y todo.

Fred negó con la cabeza.

—No lo he hecho. Pero estoy a punto de cambiar eso.

—¿Necesitan ayuda?— preguntó Ron, asintiendo con la cabeza hacia el desastre— No es que tengamos nada mejor que hacer de todos modos. Además, estoy a punto de ganar esa apuesta.

—¿No estaba ganando Hermione..?

—¡No lo está!– Ron interrumpió a Harry, haciendo que Potter se riera— De todos modos, ¿cuál es el plan?

.・゜゜・

Las tres chicas entraron a la sala común con risas y bolsas. Fue un día largo y divertido para las chicas y afortunadamente se las habían arreglado para tomar uno de los últimos carruajes de regreso a Hogwarts.  Una vez que llegaron a los dormitorios, se separaron.

T/n entró en su dormitorio, notando que Angelina y Alicia ya estaban allí.

—Oye, T/n, Fred me dijo que te diera una carta cuando regresaras– dijo Angelina—. La dejé en tu cama.

Dándole las gracias, T/n se sentó en la cama, recogiendo la carta.  La abrió y saltó cuando algo rosa salió volando. Miró el rastro de pétalos de rosa que conducía hacia la puerta. Había una nota dentro del sobre y T/n la sacó. 

Amor,

Tengo una sorpresa para ti. Solo sigue los pétalos

Fred

—¿Qué es eso?–  Preguntó Alicia mientras se acercaba a las flores, tocando una de ellas con precaución.

—No se– dijo T/n y se levantó, tocando el primer pétalo. Se dirigió a la puerta, recogió todos los pétalos y los puso dentro, luego salió del dormitorio. El rastro de pétalos flotantes también continuaba afuera, y muchas personas se habían reunido a su alrededor para ver qué estaba sucediendo.

T/n no les prestó atención y continuó siguiendo el camino de flores, que la estaba llevando hacia el patio. Algunas personas, como sus compañeras de cuarto, Ginny y Hermione, habían comenzado a seguirla, curiosas por ver qué pasaría.

Miró a su alrededor, pero no vio a Fred.  Hubo un fuerte estruendo y miró hacia arriba, viendo fuegos artificiales.  Lo que la sorprendió aún más fue que estaban formando palabras.

¿Serías mi novia? 

Su respiración se atascó en su garganta mientras los miraba. 

—¿Y bueno?– Fred había aparecido frente a T/n, la chica seguía mirando entre los fuegos artificiales que se desvanecían en el aire.  El pelirrojo sostenía un ramo de rosas de color rosa oscuro, del mismo color que los pétalos que ella había recogido, y tenía una pequeña sonrisa en su rostro.

Prácticamente toda la escuela estaba mirando ahora, habiendo salido a ver a que se debía la conmoción, pero para ella, se sentía como si estuvieran solos.

—¡Sí, Freddie, por supuesto!–  Se arrojó en los brazos abiertos de Fred mientras todos a su alrededor vitoreaban, algunos silbidos aquí y allá. 

T/n enterró su rostro en el hueco de su cuello y lo abrazó tan fuerte como pudo. Fred la abrazó con la misma fuerza.

Los dos se apartaron un poco, mirándose a los ojos. T/n miró sus labios, mordiendo los de ella por un segundo antes de inclinarse y presionar sus labios contra los de él. La multitud vitoreó más fuerte, si era posible, pero ni Fred ni T/n pudieron oírlos. 

Fred le devolvió el beso casi de inmediato, apretándola más contra su pecho. 

Cuando se alejaron, miraron de nuevo. De repente se dieron cuenta de que acababan de tener su primer beso frente a toda la escuela, T/n sintió que sus mejillas se calentaban y escondió su rostro en el pecho de Fred, mientras el chico se reía.

Se dio cuenta de que algunas personas intercambiaban dinero, incluida Hermione que le dio a Ron algunas monedas; la primera parecía amargada por eso, mientras que Ron estaba radiante.  Fred también captó la mirada de Cedric. El Hufflepuff parecía que acababa de perder el Torneo de los Tres Magos. Fred no podía culparlo. Después de todo, había reclamado a la mejor chica de Hogwarts como suya. 

—Menos mal que aceptaste, hubiera sido incómodo si no lo hubieras hecho– susurró Fred en el oído de T/n, haciendo que la chica se riera.

Los dos se alejaron y Fred le entregó a T/n las flores que le había comprado. Ella le dio las gracias cuando la gente empezó a acercarse, felicitando a la nueva pareja como si acabaran de comprometerse.

—¡Frederik Weasley, a mi oficina, ahora!– McGonagall, que había venido a la escena, llamó, haciendo que todos se volvieran hacia ella. Sin embargo, no parecía enojada. En cambio, tenía una suave sonrisa plasmada en su rostro mientras esperaba a que Fred se uniera a ella. Snape, que estaba junto a ella, no parecía muy impresionado. 

—Vale la pena la detención– dijo Fred y le dio un beso en la mejilla a T/n—. Volveré pronto. 

T/n lo observó mientras caminaba hacia los dos maestros, manteniendo las flores cerca de ella.